Por la espalda

Hace unos años, todos nos quedamos atónitos al escuchar el «cuanto mejor, peor para todos, cuanto peor para todos, mejor, mejor para mí el suyo beneficio político» de Mariano Rajoy. A día de hoy, sigo sin saber si estoy poniendo bien las comas en la frase y cuál es el verdadero significado de esta, aunque creo que realmente nadie ha llegado a averiguarlo. Sin embargo, el problema llega cuando las declaraciones de los políticos actuales nadie las entiende porque sus palabras no se corresponden con sus actos.

La política española actual es el «yo controlo» de cada noche de fiesta; nunca sabes con qué te va a sorprender al día siguiente y solo produce dolores de cabeza. Cuando crees que todo va relativamente bien, dentro de la gravedad de la situación sanitaria, económica y política que estamos viviendo, te encuentras con varios escraches, habitaciones o pisos de lujo cedidos por empresarios y dimisiones dentro de partidos políticos, aunque todo esto parece ser lo de menos.

Por si no tuvieramos suficiente con quienes salen a las calles, con independencia de su ideología, y ponen en peligro la salud del resto, desde el Ejecutivo pactan a escondidas una derogación de la reforma laboral para así poder prolongar durante quince días más el estado de alarma. Desde mi punto de vista, tanto la política como la vida misma se basan en pactar para conseguir algo a cambio, pero lo más grave es hacerlo a las espaldas, así como la mezquindad de que cada político proporcione una versión diferente del mismo hecho.

Si soy sincera, no tengo realmente claro cómo va a afectar esta derogación o si esta va a ser íntegra o parcial, ya que tampoco lo han dejado claro, pero creo que una decisión así no debe tomarse en medio de una crisis de tal magnitud. El centro de la política deberíamos ser los ciudadanos y nosotros deberíamos tener plena confianza en las instiuciones, pero es más que necesaria la transparencia para que esto sea posible. Si entre ellos se engañan, qué no van a ocultarnos a nosotros; actúan por la espalda y a nosotros nos la dan.