Ponferrada, un museo de escultura

«La escultura es un tipo de arte público que está fuera de museo y con el que los ciudadanos conviven diariamente». Lo dijo el profesor de Historia del Arte en la Universidad de León, Roberto Castrillo, que este lunes realizó en la Casa de la Cultura de Ponferrada un breve recorrido por la historia de la ciudad a través de su escultura. La conferencia forma parte de la primera edición de las Jornadas de historia local y patrimonio que organiza el Instituto de Estudios Bercianos (IEB) para ofrecer, en palabras de su directora, Mar Palacio, «una mirada crítica hacia lo local».

«La imagen de la ciudad preocupa al Instituto y la escultura aporta una parte esencial a esa visión, además es una forma distinta de conocerla», destacó Palacio. Esa imagen está polarizada en la capital del Bierzo en dos escenarios distintos, según apuntó Roberto Castrillo, «la escultura histórica con representación de personalidades relevantes de la ciudad y otra más contemporánea que no trabaja de forma monumental o ejemplar sino más interactiva».

Así, una de las esculturas con nombre y apellido más valorada por los expertos es el Monumento al Cine del berciano José Carralero. A juicio del profesor, «con indudable interés artístico y bien asumida para la ciudadanía, una de las más emblemáticas de Ponferrada». Una opinión compartida por el alcalde, Samuel Folgueral, que acudió a las jornadas y criticó con elogios esta obra.

Una pieza a la que, según reconoció el autor, «le di muchísimas vueltas», aunque bromeó, «al final me llevé la sorpresa de poder venir a Ponferrada sin vergüenza al ver el monumento». Carralero subrayó la importancia de que la escultura pública conecte con los ciudadanos, «con las personas que la van a disfrutar». Precisamente para ahondar en la memoria colectiva de los ponferradinos recurrió a algunos tópicos del séptimo arte como la figura de Marlon Brando o la cuchilla que corta el ojo en el cortometraje surrealista de los años 20, ‘Un perro andaluz’.

El documental del fotógrafo Amando Casado y del profesor Jesús Palmero, ‘Un pasado sin lágrimas. Una historia apasionada sobre la escultora Castorina’, se proyectó este lunes en presencia de la artista. «La película está en un ambiente sencillo, en mi casa, y ellos han sabido captar la sensibilidad de mi vida y mi trabajo de forma bonita», afirmó. Castorina reconoció que «redescubrió» sus figuras al ver el documental. «Al fin y al cabo el arte es eso, descubrimiento», agregó.

Las jornadas de historia local y patrimonio continúan este martes en torno a la figura de Gil y Carrasco y este miércoles con un repaso a los cambios en el urbanismo desde el inicio de la democracia.