El nuevo sistema se basa en tecnología LoRa y permite poner multitud de dispositivos a lo largo de la ciudad relacionados con el internet de las cosas. Su ventaja es que tienen bajo consumo y largo alcance de comunicaciones, destacó el regidor.
Una de las primeras incursiones con estos sistemas ha sido la colocación de sensores para medir las concentraciones de CO2. En concreto se han puesto en cuatro localizaciones, en el mercado de abastos, en la Casa de la Cultura, en el pabellón deportivo Lydia Valentín y en el Registro municipal. Mediante ellos se pueden detectar, en tiempo real, las concentraciones de CO2 e incluso dan alarma si suben los límites establecidos.
Para este primer experimento, el Ayuntamiento cuenta con un convenio con la Cátedra de Turismo Sostenible y Desarrollo Local de la UNED y con la Fundación Cartif “y estamos abiertos a que cualquier persona que quiera desarrollar cualquier tipo de estas tecnologías, que tenga un laboratorio para experimentar”.
Ponferrada se convierte, a partir de ahora en “un laboratorio para el emprendimiento y la innovación”, subraya Ramón, abierta a cualquier solución inteligente de particulares que quieran unirse a esa experimentación usando el internet de las cosas aplicable a los territorios inteligentes.
Ramón aplaudió que Ponferrada avance en este campo, que su grupo llevaba en el programa electoral, como un empuje a las nuevas tecnologías y a la adhesión de la ciudad a la Red de Ciudades inteligentes “estamos a la altura de ciudades como Sevilla o Valencia. Había experiencias previas por makers Bierzo con esta tecnología y es un campo en el que creemos y vamos a seguir explorando. Hemos reactivado esa pertenencia a la Red de ciudades inteligentes. Hemos sido una de las tres administraciones que han presentado proyectos con Ponferrada 3.0. Somos destino turístico inteligente. Tenemos un Hub de innovación con la universidad y la Ciuden y el sector privado”, explicó el alcalde.
Por su parte, laconcejala de Nuevas Tecnologías y Territorios Inteligentes, Mabel Fernández, considera que el despliegue de esa red sobre el internet de las cosas significará conseguir datos válidos para distintos sectores “la dimensión es que Ponferada será ese laboratorio en el que las empresas desarrollen esos tipos de IoT”. Las empresas trabajan con la creación, en inicio, de prototipos y después necesitan un mercado de pruebas, “puede que las empresas tengan más problemas ahí. Ponferrada se convertirá en ese mercado de pruebas previo a la comercialización de sus productos”, explicó Fernández.
“El internet de las cosas ha cambiado la forma de entender los negocios y la forma de vida”, reconoce. Un paso adelante que también “minimiza costes”.
“Ponferrada va a favorecer ese emprendimiento, y se ve beneficiada por esas inversiones que se van a quedar aquí”, aplaude Fernández.
El coste de eta nueva red “es diminuto para las grandes inversiones que se van a desarrollar”. Se han instalado cuatro sensores en cuatro edificios públicos, para medir calidad del aire y las antenas, lo que ha supuesto una inversión de unos 3.000 euros.
El técnico informático municipal, José María Beltrán considera que lo más importante es “el apoyo a este tipo de iniciativas” de emprendimiento que esperaban este paso. “En Ponferrada hay mentes brillantes y apoyar el desarrollo de sus ideas es importante”, dijo. Esta red se ha integrado en otra plataforma mundial, la TTN, la red más grande de estos dispositivos en el mundo, en la que solo hay 45 localidades en España. Reconoce Beltrán que “hay un interés muy grande por esta tecnología en Ponferrada y el Ayuntamiento tenía la obligación de convertir estas inquietudes en modelo de negocio”.
Presupuestos en diciembre
La concejala de Nuevas Tecnologías y también de Hacienda aseguró, en otro orden de cosas, que se está trabajando en rediseñar el ejercicio presupuestario para 2021. Reconoce que el Plan de reactivación económica ha hecho que se tenga que modificar. “Tenemos previsto presentarlo en diciembre teniendo en cuenta las necesidades covid y postcovid que han hecho variar inversiones y gastos”, asegura. No obstante, se mantiene la cifra global de unos 60 millones en ese ejercicio. El alcalde de Ponferrada reconoce que pese a las modificaciones del documento “no podemos renunciar a las inversiones”. De todos modos, asegura que el margen de maniobra es estrecho “hay determinadas partidas presupuestarias sobre las que no tenemos capacidad”, aunque defiende el capítulo inversor “porque es donde está la capacidad de reactivación”.