Piden al Consejo Comarcal hacer un proyecto de compostaje común

Crearía dos empleos por cada 1.800 viviendas y también sería una vía para ofrecer trabajo social a colectivos desfavorecidos

M.I.
06/11/2018
 Actualizado a 18/09/2019
Uno de los puntos nuevos de gestión de compostaje colocados en Toreno. | F. STORINO
Uno de los puntos nuevos de gestión de compostaje colocados en Toreno. | F. STORINO
Desde hace dos años, Francesco Storino trabaja en la implantación del compostaje en Toreno. Lo hizo antes desde Navarra, donde hizo el doctorado sobre este tipo de sistemas de gestión de basuras.

El primer paso fue avanzar con una subvención municipal de tres meses, que no servía para culminar el proceso, pero sí para abrir la vía experimental y de promoción de una idea piloto con la pretensión de que creciera. Ese año el proyecto se realizó con los deshechos de un barrio de Toreno, unas 45 familias, y con un punto de compostaje.

La idea fue creciendo y al año siguiente, el actual, de nuevo se plantea el proyecto para otros tres meses reanudando el proyecto, ahora con cinco puntos de compostaje y muchas más familias, explica Storino. La idea de ofrecer una nueva propuesta de gestión y tratamiento de los residuos en áreas rurales no sólo es una respuesta con menos huella ecológica, sino que permite ahorros en el sistema de recogida y tratamiento y también, a partir de 2023 es obligado, por normativa europea recoger la basura de manera separada y tratarla como tal. Storino considera que el diseño de la comarca rural, con ubicaciones aisladas y con difícil acceso hace que este tipo de gestión sea aún más pertinente y sobre todo destaca los beneficios «a nivel social», cuantificados en empleo.

Según uno de los estudios que maneja Storino «cada 1.800 viviendas se crearían dos puestos de trabajo. Aquí sería superior incluso». En 4 hectáreas de terreno agrícola, se gestionarían 200 toneladas al año de residuos y ofrecería entre 10.000 y 30.000 euros de rentabilidad final. Incluso considera que el mover las composteras y gestionar los residuos podría implicar a colectivos en exclusión social o con alguna discapacidad.

Incluso hay subvenciones en esa línea para proyectos de compostaje local, por eso Storino considera importante que el Consejo Comarcal, como agrupación de ayuntamientos, estudie seguirla «sería interesante que varios ayuntamientos se agruparan, porque para uno solo es difícil», dice.

De todos modos, considera que el recorrido es largo aún «estamos ahora en dar conocimiento de la cultura del compost, porque aún hay personas que no saben de lo que hablamos», dice. Especialmente interesante le parece en el Bierzo enfocado de manera individual a los pequeños agricultores este tipo de gestión, incluso podrían enfocarse como trabajadores para dar servicio de compostaje a nivel municipal «podría ser un complemento para ellos», explica. Para una familia de entre 3 y 4 miembros, solo se requeriría una compostera de unos 400 litros, con un coste de unos 150 euros.

Francesco realiza talleres de iniciación al compostaje estos días desde el Banco de tierras del Bierzo. El día 8 se iniciarán en Carracedelo con una jornada de tarde teórica para pasar el día 9 a Toreno para hablar del manejo de la compostera. Aunque asegura que en estos dos años de trabajo ha habido ayuntamientos bercianos interesados en el proyecto, aún ninguno de ellos ha conseguido iniciarse en la nueva gestión de residuos.
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