En el Ayuntamiento de Valencia de Don Juan se reciben paulatinamente nuevas solicitudes para matricularse en la Escuela Infantil PequeCoyanza, que cuenta ya con cerca de 30 alumnos, 2 en el aula de 0 a 1 año, siendo la ratio máxima autorizada 8; 11 de 1 a 2, siendo la ratio máxima 13 por aula, contando con dos aulas actualmente; y con 15 de 2 a 3 de un máximo de 20 alumnos.
Entre otras medidas, destaca la concejala responsable del centro, María del Mar Bueres Mosquera, “está la creación de ‘grupos de convivencia estables’, modelo en el que los alumnos sólo se relacionan entre sí, pero no con el resto de aulas, atendidos sólo por una educadora, de esta manera si surgiera un positivo Covid-19 a lo largo del curso solo habría que rastrear entre las personas del grupo, en vez de poner en cuarentena a todo el centro’.
Por otra parte, explicó la edil, se intensifica la limpieza y desinfección del centro, “incorporando una trabajadora más de limpieza, que comparte tareas con el CEIP Bernardino Pérez y que permite que durante la mañana, tanto después de los cambios de pañal como de la comida de los niños, se desinfecten las zonas usadas, además de otras comunes, garantizando así el cumplimiento del protocolo que exige la Junta, poniendo todos los recursos y desplegando todas las acciones posibles para prevenir posibles contagios y para dar más seguridad a las familias usuarias y a las trabajadoras del centro”.
Asimismo, en la medida de lo posible, “se están fomentando las actividades al aire libre de los distintos grupos y se realiza cada día distintas tomas de temperatura a los alumnos tanto a la entrada del centro como en el transcurso de la mañana, impidiendo a las familias el acceder al interior de las instalaciones y obligando a los niños a cambiarse el calzado antes de entrar al centro”.
Apuesta por PequeCoyanza del equipo de gobierno
Bueres Mosquera explica que, desde que Juan Pablo Regadera accedió a la Alcaldía de Valencia de Don Juan, PequeCoyanza ha pasado a ser una prioridad absoluta de su equipo de gobierno. Desde entonces, y una década después de su construcción e inauguración, se han realizado múltiples mejoras en el centro educativo que vienen a paliar carencias básicas que tenía.
La concejala explicó que, con los propios empleados del Ayuntamiento del servicio de obras, “se ha dado un cambio radical a las instalaciones, empezando por realizar y conectar correctamente las acometidas de saneamiento a la red general terminando con un problema de años de malos olores en determinadas zonas del centro; reponiendo todo el alumbrado exterior del edificio e interior de los patios que se encontraba totalmente desmantelado; saneando y reponiendo todos los canalones y arquetas exteriores, entre otras cuestiones elementales que incomprensiblemente nos encontramos de esta desastrosa manera”.
Por último, María del Mar Bueres destacó otras mejoras realizadas, como “la plantación de los primeros árboles dentro del centro, la rehabilitación integral de una sala anexa para que los padres puedan dejar los carritos, la pintura de varios espacios que venía demandándose durante años, la conversión de un patio interior con piedras y cardos en una zona habilitada para diversas actividades e idónea para mantener los grupos burbuja y, entre otras cuestiones menores, la colocación de protectores en todos los vierteaguas de las ventanas y puertas del centro para evitar accidentes y golpes de los ‘pequecoyantinos’, ya que para nosotros, como equipo de gobierno, es fundamental y prioritario tener unas instalaciones de primera. En definitiva, las necesidades de PequeCoyanza son nuestras prioridades”.