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¡Parrilleros, azúcar, galletas!

08/11/2021
 Actualizado a 08/11/2021
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Murió Georgie Dann, que en 2007 pasó como un torbellino por La Bañeza, hasta el punto de que tuvo que volver solo dos años después por presión popular, investido de los honores de pregonero del máximo acontecimiento de la ciudad. Y pese a que su mayor éxito es una oda a la carne, triunfó en una de las sedes de Azucarera en España, aunque también es cierto que no pocos trabajadores de Embutidos Rodríguez (Soto de la Vega) residen en la zona.

Desafortunadamente no estuve en ninguno de esos dos conciertos, pero tengo un gran recuerdo de otro, que incomprensiblemente no suele ser muy recordado, el de Celia Cruz (1925-2003) en Santa María del Parámo, que hubiera hecho mejor publicidad a la fábrica remolachera. Hace más de 20 años de aquel show de la megaestrella mundial y no creo que hoy se pudiera producir un evento igual, ni en la capital del regadío ni a orillas del Tuerto. Nos quedan esos recuerdos de ‘La Reina de la salsa’ y ‘El Rey de la canción del verano’, como monarcas de la fiesta del Páramo y de las tierras bañezanas, y como involuntarios publicistas de la industria agroalimentaria, el proceso transformador de la remolacha y de las granjas de cerdos –porque las matanzas domiciliarias están a la baja y tampoco encajan con el carácter estival del temazo de Georgie Dann. El azúcar de la cubana y los chorizos parrilleros del francés son eslóganes pegadizos–. Al azúcar ya le sacaron en su día un contraanuncio ni más ni menos que con Encarna y Toñi, las Azúcar Moreno. No hubieran venido mal en la Consejería de Agricultura ni la Cruz, ni las Salazar, ni el Dann. Aunque se esfuerce el consejero, Jesús Julio Carnero, en defender en Palencia, provincia de gran tradición galletera, que las galletas «son necesarias para la salud y el bienestar de toda la población», no tiene el mismo ‘punch’. Aunque tiene razón en una cosa, a veces, para la salud de alguien son necesarias las galletas, y de las buenas.
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