30/09/2016
 Actualizado a 15/09/2019
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La colección de premios Emmy que convirtió hace unos días a Juego de Tronos en la serie más premiada de la historia de las series de televisión se quedaría en agua de borrajas si a alguien se le ocurriese hacer un culebrón realista con los vaivenes del PSOE de los últimos tiempos.Siento como si tuviera que hablar del PSOE porque todo el mundo habla hoy del PSOE, pero más bien nada puedo aportar a semejante guión de una historia que bien podrían firmar a medias Groucho Marx, Valle-Inclán y varios de los tertulianos de Sálvame, ya que también escriben cosas.

Desde fuera se preguntan qué les pasa a estos, que nadie se lo explica y desde dentro no saben explicarlo porque no lo entienden ni ellos.

Sobre las sensaciones, desde la «tristeza» que afirma sentirel secretario general del PSOE en el Bierzo, Gerardo Álvarez Courel, hasta lo quese les pudiera estar pasando por la cabeza a tantos abuelos socialistas de corazón si aún estuvieran aquí, como el emblemático Antonio Fernández, el militante más veterano de León, al que el propio Pedro Sánchez visitó y homenajeó hace unos cuantos meses.Y Felipe González quejándose de que le han decepcionado, para más inri. Dentro de nada llueve hacia arriba.

Y los del PSOE de Ponferrada dándolo todo por la causa, esperando a que desde Ferraz contesten a un recurso para castigar a unos militantes que dicen que se han portado mal. Están allí como para atender a peleas de barro.
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