‘¡Pa matase!’ ‘¡Pa morise!’

No teman. No les voy a hablar ni de las onomásticas todas que hoy martes, día en que escribo, teóricamente se celebran de manera tan singular, por no decir triste, y aún menos del día de los difuntos –día a partir del cual usted me podrá leer–. Como tengo escrito: «Como apasionado amante / de la vida / hablo mucho con la muerte» y mis muertos cada día me acompañan y cada día les rindo gratitud, pues, gracias a su vario ejemplo y enseñanza, en muchas cosas, en ellos me reconozco, me guste más o menos en el qué, que no todo es jauja en este continuo proceso de construcción personal. Ya saben: ensayo, yerro, ensayo... y, de vez en cuando, acierto y contento. Vamos, que como el común de mortales: viviendo y aprendiendo.

Hoy lo haré del discursero del si Patatín, si Patatán o PP en breve. Los veo tan ofuscados en su privativa dis-función de certificación de buena españolidad. Si la calle era de su españolísimo fundador (demócrata de casi toda la vida), cómo no van a ser suyos el sello y tampón del patriotismo, digo, patrioterismo.

Lo confieso, estoy preocupado por la división de entendederas que dejan traslucir y lo poco que captan y/o siguen las pedagogías del que dicen su presidente (de partido). Porque me pregunto yo, si el popular vocero, Elías Bendodo, no habrá entendido la rajoyniana y jeroglífica frase de su –no sé si cuestionado o poco amado– líder. Porque, ¿o es que aún no ha entendido que, como ha dicho don Feijóo: «Cuando un hijo dice que el que más quiere a su padre –o madre, me permito añadir– es él, el resto de la familia no debe consentirlo. Porque a un padre y a una madre (¡ay esa memoria, Alberto!), lo(s) quiere(n) –con la ese y la ene contribuye este españolito– sus hijos y nadie de la familia tiene derecho a excluir a una parte de los hijos en contra de sus padres» o es que, ardoroso sectario, tan catequética frase les sirve para los nacionalistas catalanes pero no para ellos, españolistas de pro, en su patrimonializada España. Embriagados de su patrioterismo, se ponen como locos y, ¡hala!, ahí os va que os preste que yo me quedo tan orondo. ‘¡‟Pa matase!’

Y por si poco fuera, ahora también han conseguido –espero que no la ejerzan fraudulentamente– la expenduría de credenciales de buen socialista. ¿Qué desayunara esta gente? Yo quiero un poco para merendarme los días... Y las noches si aguanto. En fin, lo dicho: ‘¡Pa morise!’, pero de pena.

Y, mientras su cumplimiento de la Constitución, a la carta. Que no son ellos, se sabe, del plato del día a día.

Buena semana hagamos y tengamos. ¡Salud!