La decisión es, para los concejales de Unión del Pueblo Leones (UPL) en este municipio berciano, «una broma de mal gusto». Con yacimientos y empresas echando el cierre o enterrados bajo un alud de expedientes de regulación de empleo, por la voluntad, desde el Gobierno de España, de buscar potenciar otro tipo de energías más limpias, la formación considera «irónico» que se opte por gas natural y un «insulto» que se plantee la construcción de una planta para distribuirlo al pie de uno de los pozos más emblemáticos de toda la comarca.
«No podemos entender que se argumente para el cierre de las minas de carbón, combustible fósil, el ser un combustible emisor de contaminantesa la atmósfera, yse proyecte la instalación en una planta para distribuirgas natural licuado, combustible fósil, y por tanto combustible emisor, también,de contaminantes a la atmósfera», aseguran Melchor Moreno y Verónica del Río, concejales de UPL en Torre del Bierzo.
Ambos unen fuerzas con el procurador en las Cortes, Luis Mariano Santos, ante el «sin sentido» que supone que en las calefacciones de pueblos que se levantaron y subsistieron durante años gracias al carbón y que se encuentran al pie de pozos y yacimientos que han echado el cierre en los últimos años, se esté obligando a usar materia prima del exterior. «Se está quemando carbón extranjero, que emite más contaminantes a la atmósfera, cuando nuestras minas, que producen un carbón más limpio, siguen cerradas», añaden.
Para la formación, la iniciativa de instalar una planta de distribución de gas natural licuado al pie del emblemático pozo Viloria, supone la última muestra de «inoperancia» de la Junta de Castilla y León y de «arrogancia» por parte del ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria.
Contradicciones en el proyecto
Además del «ataque» que supone para el sector minero la instalación de una planta de gas natural, UPL denuncia varias «inconcreciones y contradicciones» en el proyecto, que tiene un plazo de veinte días para alegaciones.
La primera por el área solicitada para las canalizaciones de la red; 2,23 kilómetros, cuando desde la formación apuntan que para abastecer las localidades del término municipal se superarían los 40 kilómetros, mientras que la ubicación de la planta se encontraría en suelo rústico, a escasos metros del caso urbano, una ubicación «poco afortunada».
Por ello, los concejales piden al Ayuntamiento de Torre del Bierzo, liderado por el popular Manuel Merayo, que solicite «la suspensión inmediata» de la información pública relativa a la solicitud de autorización administrativa previa y que el servicio territorial de Industria de la Junta envíe al consistorio berciano una copia de los expedientes para sujetarlos a exposición pública y facilitar el examen tanto al Ayuntamiento, como a los titulares de los terrenos afectados.