La castaña se ha rendido a la sequía y se ha quedado mermada pero, además, está afectada por un nuevo hongo que provoca la Gnomosis, una enfermedad fúngica que también diezma la producción. Del lado positivo, García apunta que se han realizado estudios, a través de la Mesa del Castaño, gracias a la solicitud de su agrupación, para saber más sobre este hongo y ya se ha definido que afecta a los árboles que habían sido debilitados por la avispilla. Por eso la esperanza está puesta en que, si se reduce este segundo problema, también lo hará el primero. Y las inoculaciones están siendo satisfactorias en los árboles inyectados que están superando a esa avispilla que ha afectado en negativo también al año productivo anterior.
Por eso, este es otro año para pasar de soslayo y tener paciencia porque "tal vez nos quede otro año malo más", dice García. Será después cuando habrá que estar preparado para el repunte, espera, y hacerlo de la mejor manera posible, sobre todo, poniendo en valor la castaña de parede, la propia de la zona. García pide que sea esta la que escojan los emprendedores nuevos que quieran dedicarse a la castañicultura "para que no se pierda identidad" y les recomienda que "en vistas al mercado", opten por ella y no por especies híbridas "que el mercado está comenzando a rechazar".
Esa apuesta apunta que se incrementa con otra, la de la producción ecológica. De los 60 socios de la agrupación, en este momento, una decena produce en ecológico y "el comercio lo está demandando", asegura. Eso hace que se esté escogiendo este tipo de producción para seguir creciendo en una zona en la que los sotos de castaño ocupan una extensión grande, aunque se está haciendo aún un estudio sobre el número de hectáreas que completan la producción de esta zona. En ecológico sí se sabe que están entre 15 y 20 hectáreas, apunta García.
Este año, la producción que se espera, dentro de la agrupación, estará al 30% de los 100.000 kilos que deberían recogerse. El mejor año para ella fue en 2016, cuando se comercializaron más de 60.000 kilos. pero, desde entonces, esa cifra fue rebajándose hasta tocar suelo el año pasado, con una merma del 40% a la que se espera no llegar este año, en el que la recolección ha comenzado. Y lo ha hecho con lluvia, lo cual no es mala noticia "porque el agua siempre es buena cuando la castaña está en el árbol", dice García. No obstante, recomienda que se saque de los sotos cuanto antes para poder ser tratada por los comercializadores con vapor y eliminar los hongos que puedan asolarla.
El precio aún está por pactar, pero reconoce que las primeras tandas de castañas "están tiradas por los suelos en precio" y eso considera que no puede ser "porque deben tener rentabilidad" y ponerse en valor. En los próximos días se concretará este extremo con los comerciantes para que así sea.
Mantel, rutas con QR y visita a un soto
De todos modos, García reconoce que la agrupación está trabajando muy intensamente en muchas más arterias relacionadas con el castaño. De hecho volverá a poner el mantel para llevar a los restaurantes de la zona sus jornadas dedicadas a las castaña, a lo que se suma la visita a un soto de castaños en Trabadelo con un sistema QR para conocerlo mejor y poder recoger castañas en el mismo.También se señalizarán las producciones ecológicas y se colocarán otros QR en las señales de las rutas dedicadas a los castaños. Son ideas innovadoras en un espacio que García pide que se ponga en valor por parte de las administraciones y se mire de frente. Asegura que es el momento de hacerlo desde un Plan 42 que se firmó con la Junta hace al menos 3 años y que no ha contado con los castañicultores pese a que, precisamente, son los que cumplen con los dos principios del mismos: evitar incendios y obtener rendimiento del monte. Por eso García considera que "es el momento" de realizar un eje de actuaciones para esta zona con la colaboración de la Junta que fue la que suscribió esa planificación.