¡Ome coño! la conseja

Como Grupo de Filósofos de lo Rural sin Obra Publicada y Grupa de Filósofas de lo Rural con Bata Guateada al Salir al Panadero estamos siendo muy interpelados desde diferentes foros y ámbitos de la ciencia para saber si tenemos opinión y, si la tenemos, «la cuála es» sobre el asunto, el tema, el debate, la vacuna, los antivacuna, Donaldo Trón, Alex Putín, la temática y el bicho; argumentan que un colectivo de doble mirada, como el nuestro, de honda raigambre y debate hasta el amanecer –siempre que haya vino caliente y pastas– algo debería de decir para iluminar el mundo.

De iluminar ya avisamos que somos de la teoría de la paisana de Casares que cuando fueron los de la fábrica de la luz de La Gotera, en tierras de La Vid, a ofrecerle el invento que acababa para siempre con velas y candiles ella se apuntó primero y se desapuntó después con un argumento tan contundente como filosófico:

– Mirai rapaces, entiendo el invento, pero estuve yo pensando que si me traéis la luz desde La Vid cuando lleguéis aquí ya es de noche. Y yo cuando oscurece me acuesto, que en la cama siempre hay algo que hacer. Y cuando nieve, ni llegáis con la luz.

Osea, que tampoco esperéis que vayamos a ser nosotros los que le demos luz al tema, porque también pensamos, como la paisana de Casares, que cuando lleguen los gobiernos Utonómicos, los de Madrid, los Uropeos, más lo que piense Quintín el de Rucayo, que no lo echéis en saco roto, igual pasa que cuando encontréis la solución a lo mejor ya es de noche y nosotros en cuanto oscurece nos acostamos, no vaya a ser que empiece el putiferio ese de las televisiones y nos vaya a pillar mirando el obispo don Luigi, que es nuevo, y nos perimetre.

Pero opinión sí tenemos, la conseja nunca nos falta, y como dicen que ataca a los viejos regalamos la de Ricardo, que vivió 109 años y explicaba los motivos. «Ocurrió que trabajé como un burro hasta los 80 años, pues ahora que me pagan por comer y dormir que no esperen que me deje morir, yo aguanto y sigo». Pues eso.