Objetivo Bierzo

De las singularidades del Bierzo no saben nada miles de leoneses que viven al otro lado del Manzanal, y por eso podría parecer más difícil que supieran en Valladolid. Sin embargo, en tiempos de José María Aznar como presidente, la Junta supo ver las particularidades de una comarca cuyas fortalezas y debilidades, cuyo carácter, tiene menos que ver con el resto de la provincia de lo que parece. Se creó entonces el Consejo Comarcal del Bierzo, cuyas competencias han ido fluctuando a lo largo de las últimas décadas, así como su presupuesto, del que el común de los mortales ha tenido noticia a raíz delincomprensible aumento de sueldo que se aprobaron recientemente sus principales representantes. Ahora, en tiempos de un alumno de la escuela aznariana como es Mañueco, la Junta retoma su acuerdo de colaboración con el Consejo Comarcal del Bierzo, acuerdo que llega siete años tarde pero que viene a demostrar que, desde Valladolid, se conoce mejor la sensibilidad de la comarca berciana que desde otros muchos puntos de esta provincia. No lo pudo decir ayer mejor el presidente de la Diputación: «Espero que esta reunió sea de verdad fructífera y que el Consejo no tenga que ir cada año mendigando sus presupuestos». Primero el desarrollo de una comarca que necesita alternativas al carbón, y después ya nos preocuparemos de quién obtiene los réditos políticos.