Nuevos cultivos

La quinoa viene a sumarse a las alternativas que maneja el campo leonés ante las modificaciones de la PAC que exigen mayor rotación. Precisamente, las organizaciones profesionales agrarias dan la batalla para que las nuevas normas comunitarias excluyan al extendido cereal de la obligada rotación. El regadío leonés suma más de 70.000 hectáreas dedicadas a este cultivo. En gran medida son los mercados los que facilitan la gran difusión del maíz, puesto que España es deficitaria y, prácticamente, está garantizada la venta —otra cuestión es a qué precio—. Sin embargo, pese a las grandes ventajas, también tiene un coste de oportunidad. Las críticas van desde la exigencia de nutrientes que terminan por degradar los suelos hasta la mano de obra, pasando por los problemas que puede provocar una meteorología adversa para poder destinar la tierra a diferentes cultivos en la misma campaña. Sin embargo, todo esos peros se refutan por el amplio conocimiento que los agricultores tienen del cultivo estrella. Los cambios provocan incertidumbre y riesgos y el sector primario ya cuenta con suficientes amenazas en el resto de eslabones, además del cielo, las plagas o la normativa. Por eso son escasas las iniciativas como la de Raquel Rodríguez en Bercianos del Páramo. No obstante, puede que su idea sea el sustento del campo leonés en un futuro no tan lejano.