"Nuestras marchas han ido dejando un trocito de la Semana Santa por diversos lugares"

Alejandro Solís Jañez, de 16 años de edad y miembro de la banda de cornetas, tambores y gaitas de la Real Hermandad de Jesús Divino Obrero, fue este jueves el encargado de hablar en nombre de las 15 bandas y agrupaciones reconocidas en esta V Negrilla de Oro.

Lo hacía agradeciendo esta distinción que acogían con enorme ilusión y echando la vista atrás, a cómo empezaron a acompañar a los pasos que hasta hace 60 años recorrían en silencio las calles de León. De hecho, la cofradía a la que pertenece Alejandro, es la más antigua de la ciudad y el próximo año celebra su sexagésimo aniversario. Pero ayer era día de hablar de las bandas y agrupaciones en general, y así lo hizo, de recordar las idas y venidas, los buenos y, por qué no, también malos momentos qué han atravesado estas formaciones musicales a lo largo de su historia y que, sin embargo, no han logrado quebrar la ilusión con la que trabajan año tras año, mes tras mes, semana tras semana, para «culminar poniendo música a nuestros pasos, a nuestra querida Semana Santa».

Esta distinción «es un premio a nuestro trabajo y sacrificio, al compromiso que durante todo el año contribuye a engrandecer nuestra Semana Santa; un premio al resultado de años de trabajo, de nacimiento de unas y otras formaciones que empezáramos en 1959 y hasta nuestros días», destacaba en su discurso.

«Hubo un tiempo en que nuestros pasos salían en silencio, a golpe de horqueta, y luego empezaron a ser llevados a son de la música de bandas municipales y militares. Y así nos pusimos en marcha». En este paseo por la memoria de las 15 bandas y agrupaciones musicales, Alejandro aludía a aquellos tiempos en los que «poco a poco fueron naciendo nuestras secciones dentro de nuestras cofradías, con muchas dificultades a la vez que con generosas ayudas». «Los instrumentos que nos donaban, los que comprábamos e, incluso, algunos que nos encontrábamos en un desván y otro que nos inventábamos», para llegar hasta hoy «llenando e iluminando nuestra Semana Santa».

Pero su labor va mucho más allá, pues han paseado sus marchas por diferentes localidades y ciudades de España, «lugares donde también han sabido apreciar nuestro buen hacer y donde también hemos dejado nuestro trocito de Semana Santa leonesa».

La enorme emotividad con la que Alejandro alabó el trabajo de sus compañeros, y el suyo propio, por supuesto, su dedicación, su entrega y su agradecimiento por este premio arrancó los sinceros aplausos del ingente público que siguió esta gala en el Palacio de Exposiciones de León, donde estuvieron presentes las 15 formaciones musicales de la Semana Santa leonesa que recibieron tan merecido homenaje.

Alejandro Solís trasladó su agradecimiento a La Nueva Crónica en nombre de todos sus compañeros de las distintas bandas y agrupaciones y renovó el compromiso de todos ellos con la Semana Santa leonesa, a la que auguró mucho futuro para seguir haciendo historia.