Con la pésima noticia de la lesión de Acacio, pero superando todas las expectativas y con excelente imagen y resultados. Así cierra su pretemporadael Abanca Ademar, que finaliza sus amistosos con una derrota frente a uno de los candidatos a todo en la ‘Champions’, el Nantes, y cinco victorias: frente a Benfica, Novas en la prórroga, Maia, Atlético Valladolid y Nava.Esta última se produjo este domingo, en la final de la Copa de Castilla y León, donde los de Manolo Cadenas (que tuvo que seguir el partido desde la grada por su expulsión en semifinales) se impusieron por 33-27 al conjunto segoviano, recién ascendido a Asobal y que dejó una gran imagen, poniendo contra las cuerdas durante toda la primera mitad a la escuadra ademarista, que al igual que había hecho en las dos ediciones anteriores se acabó llevando el título.
Tras no coger nadie más de dos goles de renta en la primera parte, el Ademar rompió pronto en la segunda Lo hizo con más sufrimiento del esperado, gracias a una gran segunda mitad y con los zurdos a todo gas y liderando el ataque ademarista.
Brilló David Fernández, único lateral izquierdo puro con que cuenta Cadenas hasta que vuelva Vieyra y que demostró que está listo para asumir el reto y la responsabilidad de ser el indiscutible titular con ocho goles; y lo hicieron, como viene siendo habitual durante todo el verano, tanto Mario López como Gonzalo Pérez, con cuatro tantos cada uno.
Slavic, de nuevo decisivo en portería; Mosic, atinado en el lanzamiento lejano; Lucin, que sigue dando pasos adelante en su adaptación y destacando en la dirección; y Jaime Fernández, que parece que volverá a iniciar la liga en un gran estado de forma como el año pasado, destacaron también en un choque tremendamente igualado durante los primeros 30 minutos y de claro color leonés en los 30 siguientes.
Y es que al descanso se llegó con una mínima ventaja (15-16) del Nava que dirige Dani Gordo y sin que ninguno de los equipos mandara por más de dos goles. Pero poco a poco, tras la reanudación, el físico marcó diferencias y la velocidad leonesa empezó a hacer estragos en la defensa local.
Lo hacía sin grandes parciales, pero agrandando poco a poco la renta. Con el 22-18 primero, tras el que el Nava nunca volvería a ponerse por debajo de los tres goles. Con el 26-21 que marcaba una nueva máxima en el ecuador. Con el 28-22 que dejaba sentenciado el choque y propiciaba que empezaran a entrar los jóvenes de los dos equipos después. Y finalmente, con 32-25, en la primera vez en la que el Ademar se iba de siete, coincidiendo con el minuto final.
Las pruebas se han terminado. El próximo partido será ya con puntos en juego y con un equipo de ‘Champions’ como el Bidasoa enfrente.