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Nacho y Luis, tanto da

02/11/2017
 Actualizado a 13/09/2019
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Según dicen siempre mis amigos Nacho y Luis (‘güevones’ de pro), siempre hay dos caminos para subir una montaña o para enfrentarse a una dificultad. Un camino siempre es largo y difícil, pero por si lo prefieren, siempre habrá otro más corto pero más difícil, tú eliges (Ellos siempre eligen el mismo). Con su filosofía caprina se pueden abordar los problemas de cualquier índole, sabiendo que la solución nunca será fácil y que, en cualquier caso, el esfuerzo será grande o superlativo. Hay algunos que no quieren acompañarles en sus trotadas montañeras porque siempre prefieren la opción de lo fácil, de lo cómodo, de lo que no exige ese esfuerzo, o no lo exige tanto, aun sabiendo que se pierden lo mejor del camino, aun sabiendo que de ese modo no se enfrentan al reto, al duro reto y que por tanto nunca disfrutarán del éxito de estar arriba, de encontrar la solución. Si la mayoría de los dirigentes de nuestro país tuvieran la mitad de güevos que tienen ellos, los problemas enquistados que nos aquejan a todos los ciudadanos estarían o resueltos o en vías de ser solucionados. Quedarse sentado esperando a que el problema se necrose y desaparezca es de cobardes e inconscientes, y cobardes e inconscientes son, a veces, los de uno y otro lado. Cuántas veces escuchamos cada día, cada hora, que los culpables son los otros, que ellos sí tienen razón en todo y que lo que ellos pregonan es la verdad absoluta. A que pocos de ellos vemos esforzarse y ganarse por tanto el sueldo público que les pagamos entre todos. La sociedad está dispuesta a perdonar los errores del que camina y se equivoca, que no los engaños, y debiera abochornar al que sentado espera el fallo del otro sin aportar nada él. Por si piensan que me refiero a los de lejos, se equivocan. Los nuestros, los más cercanos, los locales, hacen lo mismo. Yo, cuando los del título me dejan elegir, siempre elijo el camino más duro. No sé si llegaré, pero nunca dejaré de intentarlo porque no quiero renunciar al éxito de conseguirlo.
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