A pesar de que el conjunto berciano dio un paso de gigante gracias a la victoria ante el Llagostera (1-0), necesita comenzar a sumar sí o sí a domicilio para seguir manteniendo a raya los puestos de descenso. Y es que los blanquiazules no pueden permitirse el lujo de otro tropiezo como el del Tartiere. Aunque buena parte de la permanencia pasará por los duelos directos ante Almería y Albacete en su estadio, Fabri quiere mejorar el rendimiento fuera de casa -solo una victoria en 16 partidos- para no fiarlo todo al Toralín.
Más ambiciosa es la meta de los burgaleses. Aunque los de Carlos Terrazas solo tienen seis puntos más que los bercianos y están lejos de ser aquel equipo que en enero y febrero marchaba con paso firme hacia Primera División -una victoria, tres empates y cuatro derrotas en las ocho últimas jornadas-, siguen teniendo el ‘playoff’ a tiro y afrontan la visita de la Deportiva como el penúltimo tren que le devuelva a la pelea por la promoción.
Jonathan y diez más
Fabri hará cambios en el once. El lucense buscará dar una vuelta de tuerca para conseguir la segunda victoria de la temporada a domicilio. El buen papel de Camille ante los catalanes y el bajo nivel de Álvaro Antón en los últimos partidos podría empujar al lucense a optar por un doble lateral, con Casado como interior y el francés como carrilero.
Con Berrocal ausente por sanción y Djordjevic y Hume por decisión técnica, Jebor apunta a un once en el que seguro que estará es Jonathan Ruiz, que jugará su partido 300 como blanquiazul. Se caen de la lista por lesión Aguza, Andy y Basha, baja de última hora por unas molestias en la rodilla.
Fabri, optimista
El técnico de la Deportiva cree que el equipo va en línea ascendente y es «optimista» de cara al partido de esta tarde en Anduva, aunque recuerda que de nada sirve el buen trabajo de los entrenamientos si no se plasma en el campo. «Veo al equipo mucho mejor, más rápido, más fuerte, mejor técnica y tácticamente, pero eso no basta», explica el lucense, que asegura que van a «plantar cara» ante un Mirandés que a pesar de haberse desinflado en las últimas semanas, está haciendo una campaña «sensacional». Es un equipo diferente y están haciendo una temporada extraordinaria. No es un plante como el del Oviedo a nivel individual, pero está muy bien trabajado», apostilla.
El gallego espera cambiar la dinámica negativa de los blanquiazules a domicilio y ofrecer la buena imagen de Tarragona, donde el equipo sacó un punto y tuvo «opciones de llevarse la victoria».