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Mira que son atorrantes

25/04/2021
 Actualizado a 25/04/2021
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Cuando empezó a llegar lo que Quintín llamaba «el torismo extraordinario» –es decir, los que venían más allá del Valle de Aller, que eran los alleranos, o de Mieres, que eran los mineros que venían con coche sin tubo de escape al Nagasaky de Villamanín o la Royal Sigor’s de Pola de Gordón– los que peor fama tenían eran los de Madrid.

Que no es que los de Madrid ‘de aquella’ trajeran enfermedades, no es eso, que entonces las enfermedades te entraban y nadie averiguaba quien las había traído; salvo los picores bajeros, que todo el mundo sabía dónde se cogían pero nadie se atrevía a confesarlo, aunque no había más que vigilar un poco y ya veías quien andaba metido en sulfatos o pedía bajo cuerda al farmacéutico de León –cualquiera se atrevía a pedirlo en el botiquín del pueblo– una azitromicina «para las muelas para uno del pueblo», con el riesgo de que ironizara el boticario: «Muy abajo tenéis las muelas por aquella zona».

Bueno, vuelvo al suco que ya me esnorté, como siempre. Venía la cosa a cuento en lo tocante a que «el torismo extraordinario» que más peor predicamento tenía entre la ruralidad que pasa el invierno en el pueblo eran los de Madrid. Y se daba para ello una explicación genérica que era definitiva, no precisaba excesivas explicaciones a mayores: «Es que son muy atorrantes, mucho».

Lo peor que se puede ser en un bar donde se juega la partida: atorrante. Que es una condición jodida porque no tiene falseo, la aguantas y punto, porque además hablan alto, como allí hay contaminación y ruido se conoce que se les suben los altavoces.

Y es que además de vivir en un sitio que no es como dios manda, «en una casa con flores en el balcón según entras a mano derecha y cosas así», no, hace falta llevar la dirección, te hablan de cosas que te importan un pijo, que si el coche se abre con un mando, que si las puertas de los garajes se abren solas, que si la cocina no necesita leña para hacer la comida...

Pues ahora sólo se habla de Madrid,. dios, ¡qué atorrantes! No cogerán un carbunco que precise de antibióticos para las muelas. Salud.
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