Messi y los salvavidas

Maximino Cañón
26/08/2021
 Actualizado a 26/08/2021
Es difícil creer que un mundo civilizando, donde los avances han conseguido que España, después de Japón, tenga la mayor esperanza de vida, donde tras una terrorífica pandemia mundial gente que después de unas carreras brillantes, investigando sin descanso, y con unos sueldos de risa comparados con otros, cuyo mérito es dar satisfacción a los seguidores del noble deporte del fútbol, o balompié, se tornen así en las escalas de valores. Para la satisfacción de todo el planeta empezamos a ver una tímida salida a la macrocrisis provocada por el Covid salvando vidas por doquier gracias a unos investigadores que, casi en el anonimato y sin presunción, nos llenan de esperanza. Digo esto a modo de introducción para posicionarme a favor de esta ilusión, frente a otro fenómeno que, sin tener nada que ver con lo enunciado, acapara las portadas y las noticias en casi todos los informativos de todo el mundo. Lo que escribo a continuación me deja perplejo, y pone de manifiesto, que mientras España, y el resto del mundo, se esfuerzan en encontrar el remedio para frenar al Covid 19, y virus adyacentes, de aquí y de acullá, unos saltan de contentos, dando recibimiento de primer ministro mientras otros lloran por la pérdida del mejor jugador de fútbol de todos lo tiempos (según dicen): el idolatrado Messi, que cobrando cantidades de vértigo, y después de una vida en el Barcelona, pasará a formar parte del Paris Saint Germain. El motivo de su marcha al equipo francés se debe, al parecer, a que allí no hay limitaciones y se cobra más. Sigo sin entender, de verdad, como ahora que está tan de moda la palabra ‘empatía’, no se pone en el lugar de sus seguidores, cuando muchos de ellos no llegarán a los mil euros mensuales de sueldo, pero no se pierden un partido de su ídolo, aunque a comer tengan que ir a casa de sus padres. Que conste que cada uno es muy libre de hacer lo que le pida el cuerpo y de gastar su dinero en lo que le parezca bien. ¡Faltaría más!, simplemente doy mi opinión. Ahora doy mi otro parecer. Por ejemplo cuando uno tiene que ser atendido como beneficiario de una sanidad universal y gratis, algunos se quejan de la atención recibida cuando, en muchos casos, podemos seguir en este mundo con vida gracias a los cuidados recibidos por profesionales con una gran formación y vocación encaminada a salvar vidas y con unas retribuciones en nada comparables, ni en lo más mínimo, a lo que determinados ídolos mediáticos perciben que, si bien producen unas horas de diversión, o de satisfacción personal, nada tiene que ver con los que, como ya he expresado anteriormente, hacen posible que podamos permanecer en este mundo disfrutando de lo que nos ofrece esta vida y todo ello en el mas absoluto anonimato. Para mí siempre será mucho más importante (también lo dije en otra ocasión) salvar una vida que evitar que un equipo de fútbol baje de categoría. Viva el fútbol y el deporte, en todas sus manifestaciones, porque la gran mayoría no son Messi ni otros jugadores de primera línea cuando, a lo mejor, los deportes que otros practican requieren mucho más esfuerzo y son menos valorados, pero esa es otra cuestión. A todos los investigadores, que de una manera silenciosa se esfuerzan en encontrar remedio frente a los males que nos acechan; a los trabajadores de batas verdes y blancas, y al resto de servidores públicos que velan por nosotros, mi admiración sin límites. Mi apoyo y reconocimiento a la Sanidad Publica, sin paliativos.
Lo más leído