Menos vecinos sin internet de calidad

Acceder a una buena conexión de internet en algunas zonas rurales de la provincia no siempre es sencillo. Sin embargo, los números reflejan que los problemas son cada vez menores. Concretamente, el consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, explica a este periódico que el número de habitantes de la provincia que tiene una conexión con una velocidad inferior a 30 megas se situaba al cierre del pasado año en un total de 80.222.

Esto supone una reducción de un 71% en comparación con el dato referido al año 2013, cuando eran 277.000 los leoneses que se encontraban en esta situación. «A veces cuesta oír determinadas cosas, porque hay visiones demasiado catastrofistas, pero en materia de banda ancha no es así. En 2013 eran más de la mitad de los habitantes de la provincia los que no llegaban a 30 megas», defiende el consejero.

Además, los datos que maneja la Junta reflejan que únicamente hay 10.577 vecinos de la provincia de León que tienen que conformarse con una conexión a internet que no alcanza los 10 megas de velocidad.

10.577 son las personas que viven en la provincia de León y que al cierre del pasado año tenían una conexión a internet con velocidad inferior a 10 megas En cualquier caso, el consejero recuerda que la prestación del servicio de banda ancha es «universal» por dos vías. La primera es la de Telefónica, que tiene obligación de prestarlo por el medio técnico que estime con una velocidad de al menos un mega. «Es una obligación que figura en en la Ley de Telecomunicaciones. Obviamente, un mega tiene es muy poca velocidad si pensamos en casas de turismo rural u otros negocios en zonas orográficamente complicadas donde es difícil que llegue la señal», admite Suárez-Quiñones.

La otra opción es la del satélite, que ofrece velocidades de 22 megas o superiores en cualquier sitio de la comunidad. «El dato de 10.577 personas que no tienen conexión a internet o que no llegan a diez megas se refiere a medios terrestres, porque por tecnología de satélite pueden tener 22 megas a precios que antes eran caros pero que ahora son relativamente asequibles», agrega el consejero antes de destacar que la Junta paga la instalación. «Tenemos una serie de ayudas para que los vecinos instalen el satélite, que cuesta 400 euros», concluye Suárez-Quiñones.

La Junta ultima además la convocatoria de 15 millones de euros en ayudas a las compañías para impulsar proyectos de llegada de banda ancha a distintos lugares de la comunidad. «Van a financiar el 90% de esos proyectos y van a dirigirse a municipios de menos de 500 habitantes», explica antes de recordar además el contrato de telecomunicaciones de la Junta, que incluye mejoras para llevar la banda ancha a otras 164 localidades de la comunidad. Finalmente, el consejero destaca que se está estudiando con el Gobierno el convenio sobre escuelas conectadas, que llevaría la banda ancha a 900 centros educativos de 800 localidades. Además, las propias compañías amplían sus despliegues de fibra óptica y de 4G para ir «regando» la comunidad. «Esperamos que en 2019 las cifras sean aún mejores», concluye.

Suárez-Quiñones se refiere además a las sombras que existen aún en determinadas zonas de la provincia en la recepción de la Televisión Digital Terrestre (TDT). «Aún hay áreas delicadas, pero la Junta ya hizo un esfuerzo enorme en la transición entre la televisión analógica y la digital. Construyó 651 repetidores para rebotar la señal y que llegue adecuadamente a las zonas rurales. 169 están en la provincia de León. Cada año nos cuesta más de cinco millones de euros su mantenimiento. Pese a todo, hay dificultades. Estuve recientemente en la zona de Babia y este año vamos a implementar proyectos de mejora en este y otros puntos de la provincia en los que sigue habiendo problemas», afirma.