Mekatar plantea un Erte para la plantilla de la planta roblana

La idea inicial es que comience a funcionar a pleno rendimiento en enero, si bien será la demanda de producción la que marque los ritmos

Estefanía Niño
29/08/2020
 Actualizado a 29/08/2020
El comité de empresa ha celebrado asambleas informativas. | L.N.C.
El comité de empresa ha celebrado asambleas informativas. | L.N.C.
A principios del presente mes de agosto se conocía que la planta de fundición ubicada en La Robla, y hasta entonces de Castmetal, cambiaba de dueños tras una compra y pasaba a ser propiedad de la marca vasca Mekatar. Una compra que sorprendía a todos, incluso a los propios trabajadores en Erte, y que generaba dudas sobre la continuidad de la actividad y de los puestos de trabajo.

El comité de empresa ya ha tenido las primeras tomas de contacto con el director general, que casualmente es la misma persona que venía realizando esas gestiones con CastMetal, y esperan poder conocer a los nuevos propietarios la próxima semana, previsiblemente el próximo miércoles, con quienes han tenido ya alguna conversación telefónica.

Hemos pedido que se vaya rotando la plantilla cada quince días, y que se cree una bolsa de empleo con los compañeros a los que se les acabó el contrato en junio En esta situación de transición, Mekatar plantea un nuevo Erte que comenzaría el 1 de septiembre y se prolongaría hasta el 31 de diciembre. Una negociación en la que los representantes sindicales han puesto algunas condiciones, ya a priori aceptadas, "hemos pedido que se vaya rotando la plantilla cada quince días, y que se cree una bolsa de empleo con los compañeros a los que se les acabó el contrato en junio", explicaba desde el comité de empresa José Antonio Diago. Otras condiciones, como lo de tipo económico, han quedado de momento sobre la mesa. Las negociaciones continuarán el lunes, y el Erte planteado sería para la totalidad de la plantilla.

En esta última reunión se les ha entregado un documento en el que se indica que la situación laboral será la misma y se respetarán los contratos, si bien los representantes sindicales esperan a un encuentro formal con el propietario para analizar la venta de las instalaciones ya que la conocen "de palabra".

La idea de la empresa, según se les ha explicado, es que a partir del mes de enero la planta roblana comience a funcionar "a pleno rendimiento". La situación de estos meses de Erte estará marcada por la demanda de la producción, "nos dicen que serán unos meses de transición, que igual poco a poco van sacando gente del Erte en función de lo que vayan necesitando".
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