Mejoría lastrada por la corta rotación

El Ademar derrota al Cangas (21-20) pero cae 15-19 con el Valladolid tras llegar fundido en una primera línea que apenas descansó / Los pivotes Liapis y Soljic, la sorpresa más positiva

Jesús Coca Aguilera
14/08/2021
 Actualizado a 14/08/2021
Virbauskas intenta zafarse de la defensa. | MAURICIO PEÑA
Virbauskas intenta zafarse de la defensa. | MAURICIO PEÑA
Con la primera victoria de la pretemporada, 21-20 ante el Cangas, y con otra derrota pero de sabor muy distinto a la del primer día por los condicionantes y la mejor imagen por 15-19 frente al BM Valladolid.Así saldó el Abanca Ademar su segundo test de pretemporada, disputado en Cubillos del Sil con un novedoso formato de triangular con dos partidos de 40 minutos, en el que los leoneses mostraron una evidente mejoría con respecto al estreno pero pagaron su corta rotación, que hizo que la primera línea lo jugara prácticamente todo y, en agosto, eso era sinónimo de llegar sin gasolina a los últimos minutos.Pese a todo, las citas volvieron a dejar notas positivas. Y la principal probablemente sea el rendimiento de los pivotes, donde Soljic y Liapis se están convirtiendo en las sorpresas agradables de estas primeras semanas. El croata volvió a dejar claro que ahora mismo es el mejor baluarte de un 6-0 que tuvo minutos a gran rendimiento pese a que no acompañó la portería, donde Bomastar hizo menos intervenciones que en La Bañeza y Panos volvió a estar muy desacertado, sin tocar ni un balón y haciendo presagiar un problema en ese fondo de armario bajo palos, donde Honrado tuvo también minutos sin escaso éxito.

Ademar ganaba a Valladolid al descanso y llegó a tener balón para ponerse 16-16 antes del tirón pucelano final Por su parte Liapis donde más brilló fue en ataque, con más efectividad en el primer partido que en el segundo cuando estaba ya sin fuelle, pero demostrando movilidad y buen lanzamiento, hasta el punto de ser encargado de lanzar un penalti, algo nada baladí dado que a los leoneses se les volvieron a atragantar los siete metros.

¿Más detalles que dejan los partidos entre las numerosas caras nuevas? Los primeros buenos minutos en el lanzamiento de Boskos, que en la primera mitad frente al Cangas parecía alargar el desastre del primer día pero luego soltó el brazo con acierto, además de estar sólido en defensa. La demostración de que Jozinovic puede ser un arma de doble filo en ataque, capaz de desatascarlo con sus potentes disparos o de enlazar varios fallos seguidos. O la sensación de que a Virbauskas le sobra físico y valentía para hacer daño con sus penetraciones, aunque le falte acertar más en la toma de decisiones.

Con eso y un problema con los balones, que apenas botaban, lastrando el juego de los tres equipos, el Ademar ganó primero por la mínima al Cangas, con ese 21-20 que se apretó al final ante los errores en ataque cuando con el 21-17 el triunfo parecía asegurado.

Y luego, ante un Valladolid que venía de tener una hora de descanso, puesto que había jugado el primer partido donde también ganó al Cangas, el equipo leonés se quedó sin fuelle, pues además sólo jugó el canterano Mario Fuertes al primar Cadenas el intentar compenetrar cuanto antes a un equipo con tantas novedades sobre dar más descanso, y faltar aún Marko, Guilherme, Antonio Martínez, Lodos y los dos fichajes que restan por llegar.

De ese modo, pese a que Ademar llegó ganando 10-9 al descanso, en la segunda mitad fueron desde el arranque a remolque, y aunque llegaron a tener balón para poner el 16-16, Casqueiro erró solo ante el meta y después un par de polémicas decisiones arbitrales que cabrearon mucho a un Cadenas que acabó protestando en mitad del campo con el balón en juego, Valladolid rompió el choque y acabó venciendo 15-19.
Lo más leído