Masa estudia incrementar las jornadas y sustituir despidos por bajas incentivadas

Los sindicatos retoman este jueves las negociaciones con la empresa con el fin de llegar a acuerdos

D. Aldonza
29/10/2015
 Actualizado a 22/08/2019
La central térmica de Anllares, en una imagen de archivo. | César Sánchez (Ical)
La central térmica de Anllares, en una imagen de archivo. | César Sánchez (Ical)
La tercera reunión entre los sindicatos y los responsables de la auxiliar Masa Galicia que se celebró este miércoles en la central térmica de Anllares, propiedad de Gas Natural Fenosa, para negociar el Expediente de Regulación de Empleo Temporal (Erte) ha avanzado en la consecución de varios puntos de encuentro entre las dos partes. Después de más de cuatro horas de conversaciones, el portavoz de los trabajadores, José Crespo, considera que existe predisposición por parte de la empresa para aceptar algunas de sus peticiones.

En esta línea, Crespo ha anunciado que la empresa valora modificar el porcentaje de reducción de la jornada laboral. En un principio se había fijado que las jornadas fueran reducidas en un 50% de su duración, mientras que Masa estudia ahora aumentar las horas y que el recorte no sea tan drástico. La medida afectará a 13 de los 28 trabajadores en plantillahasta el 1 de enero de 2017 -cuando finaliza el contrato entre Masa Galicia y la compañía eléctrica-.

A la espera de retomar los contactos con la subcontrata de Gas Natural Fenosa este jueves a las 9:00 horas, Crespo asegura que «la intención de los trabajadores es alcanzar un acuerdo». No obstante, aclara que no habrá un consenso a cualquier precio. «El propósito es llegar a un acuerdo, pero este será el que consideremos válido, es decir, el que aminore mucho las consecuencias», declara el portavoz de la plantilla, que recalca que la intención de los sindicatos es «reducir al máximo los despidos».

Y es que los afectados por el expediente de regulación tienen edades entre 52 y 60 años y una trayectoria profesional de cerca de 40 años en la empresa. Por este motivo, Crespo adelanta que Masa Galicia ya ha aceptado «de manera puntual» sustituir algunos paros por bajas incentivadas. «Algunas han cuajado pero han sido conversaciones individuales con los afectados y no en la mesa de negociación», apunta Crespo, que precisa que se trata de trabajadores que rondan los 60 años, con pocas posibilidades de encontrar otro empleo o de acceder a una pensión de jubilación, y a los que, declara, «les podría interesar aceptar alga baja».

«Qué duda cabe de que el hecho de que la empresa en la que has trabajado durante 36 años quiera echarte a la calle propicia recelo, pero la predisposición de la empresa es correcta», confiesa el representante de los trabajadores, que espera que en la reunión de esta mañana la empresa ofrezca algunas nuevas concesiones. Por el momento, habrá que esperar los pasos de Masa Galicia y la respuesta de los trabajadores.
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