Más difícil, imposible

El 23 de agosto de 2014 el Atlético Astorga jugaba en La Eragudina el primer partido de la historia del club en la SegundaDivisión B. Algo menos de dos años después, el equipo maragato puede disputar su último encuentro en la categoría de bronce por el momento si no logra lo que sería una de esas épicas gestas de las que, por otra parte, está llena la historia del fútbol.

Es el momento de acordarse de aquella eliminatoria de fase de ascenso ante el Mensajero, en la que absolutamente nadie daba un duro por un Astorga que en la ida encajaba un 4-0. Sin embargo, La Eragudina pudo y en tras igualar el partido en el tiempo reglamentario los maragatos pasaron de eliminatoria en la tanda de penaltis.

Los muros del estadio ya han visto de qué es capaz un equipo que deberá encomendarse a las pocas opciones matemáticas que tiene de jugar la promoción aun logrando ganar a un equipo que llega a Astorga arropado por cerca de 1.000 aficionados y jugándose directamente medio ascenso.

El Racing de Ferrol se juega a una carta optar al ascenso a Segunda por el camino corto y que da una segunda oportunidad, el de los primeros clasificados de los cuatro grupos, o por el largo y sin colchón, el del resto.

No le vale solo con ganar al Astorga, que debe esperar las derrotas de Sporting B y Cacereño para seguir vivo Los gallegos han tenido en la mano lograrlo por la vía rápida toda la temporada, pero han dejado los deberes para última hora. Si los de Tena quieren ser primeros deberán ganar, aunque el empate les serviría dependiendo de lo que hagan Tudelano y Racing de Santander, que son los otros equipos implicados en la pelea.

Sin embargo, solo hay tres puntos para repartir entre dos equipos que los necesitan como el comer, si bien es cierto que para objetivos muy distintos.
El Astorga los necesita para tener al menos quince días de vida más en la categoría, o lo que es lo mismo, jugar la promoción por el descenso ante un rival de los otro cuatro grupos. Pero lo cierto es que ya no solo dependen los de Paulino de ganar al líder, a un equipo que, igualmente, ya lograron ganar y en su propio feudo. Los maragatos dependen de que se den otros dos resultados más que deben ocurrir sí o sí para seguir vivos.

Si el Astorga logra ganar al Racing de Ferrol, será el momento de mirar hacia Gijón y Estella, donde Sporting B y Cacereño se enfrentan a Guijuelo e Izarra respectivamente. Los salmantinos, en plena lucha por la Copa, deberían ponerle las cosas al menos difíciles a los rojiblancos, mientras que el Izarra querrá despedir la temporada en casa con una victoria ante un Cacereño que es el mejor situado de los tres equipos en la pelea por el descenso para ocupar esa posición de promoción. Los otros dos se irán a Tercera.

Más de 1.000 aficionados del Racing de Ferrol llegarán a la capital maragata para apoyar a su equipo en una cita claveUn día por tanto para forjar héroes y leyendas, y es ahí donde la plantilla del Astorga deberá crecerse para dar un último empujón hacia el vacío con la fe de encontrar en la caída un colchón. Paulino no podrá contar con Lago ni Juanra lesionados y tampoco lo hará con IagoBeceiro por sanción.

Por su parte, el Racing de Ferrol viajará con todo su plantel en vistas de una posible celebración liguera, si bien Miguel Ángel Tena decidirá a los 16 convocados en las horas previas al encuentro al no contar con ninguna baja de importancia.

Con ellos, llegarán nueve autobuses de aficionados gallegos que junto a los numeros coches particulares que se desplacen desde Ferrolterra sumarán más de mil aficionados visitantes en un partido que será además retransmitido por la televisión gallega. Por parte de los hinchas locales, el club ha repartido dos invitaciones para cada socio, por lo que se espera una entrada de en torno a los 3 millares de espectadores en lo que sería una de las mejores entradas de la historia de La Eragudina.

Sobre las siete de la tarde habrá celebraciones y lágrimas sobre su césped, solo falta saber quiénes serán los protagonistas en uno y otro lugar.