¿Pero ver a jugadores que estén jugando en ese momento en el que se disputa el campeonato en el conjunto ademarista? Eso es más complicado, hasta el punto de que sólo había habido dos en la última década y pasaban ya cuatro años desde el último.
En el tercero se convierte, cortando de paso esa racha, el pivote Rubén Marchán, que consiguió ganarle la partida a un Julen Aguinagalde que se presentaba como su principal competencia y entrar en la convocatoria de Jordi Ribera para el Campeonato del Mundo de Egipto que comenzará este miércoles.
Costoya fue al Mundial de 2017, aunque fue cortado a la mitad, y Ruesga al de 2011, donde España fue campeona El manchego, de 27 años, llegó al Ademar la pasada temporada, siendo el primer fichaje realizado por Manolo Cadenas tras su fichaje. Debía sustituir a un Pesic que había ido a más en su etapa en León y se antojaba como una apuesta arriesgada, pues tras debutar en Asobal con el Cuenca parecía haberse estancado en un Benidorm en el que tenía un papel secundario y venía de promediar apenas dos goles por partido, pero de la mano del técnico de Valdevimbre su crecimiento ha sido brutal.
Le queda mucho por mejorar aún en defensa, donde Cadenas sigue dándole minutos y haciéndole trabajar para que siga creciendo (está en duda en si seguirá haciéndolo o no en León el año que viene pues termina contrato en junio, su caché lógicamente ha crecido y serán muchos los equipos del balonmano europeo interesados en él); pero en ataque se ha convertido en un jugador desequilibrante.
Seguirá así Rubén Marchán la estela de los asturianos Alejandro Costoya y Carlos Ruesga, los dos últimos ademaristas en grandes competiciones internacionales.
En el caso del lateral, que jugó dos temporadas en el Ademar, estuvo en el Mundial de 2017, si bien con un papel secundario y siendo de hecho cortado a mitad del torneo cuando Raúl Entrerríos se recuperó de sus problemas físicos. Su lanzamiento y rendimiento en León le permitió entrar en una selección de cuyos planes, tras irse a Francia al Chambery, ha terminado desapareciendo casi por completo.
En cuanto al central, que pasó tres años en la escuadra ademarista y ha estado siempre en equipos de primer nivel mundial tras irse de León (pasó por Veszprem, Barcelona y desde 2016 está en el Sporting de Lisboa), estuvo presente en el Mundial de 2013 disputado en España y en el que el combinado nacional logró proclamarse campeón.