Respecto a los datos de pernoctaciones en el inicio de esta temporada estival, a León le sigue Segovia, con 6.605 viajeros. En el extremo opuesto se situó Valladolid, con 2.525, por detrás de Palencia (3.023), Zamora (3.465), Salamanca (4.149), Soria (4.354) y Burgos (6.572).
Datos de la comunidad
Castilla y León recuperó el pasado mes de junio el liderato en el ranking de personas que optaron por el turismo rural en España, al registrar 49.072 viajeros, superando a Cataluña que desciende al segundo lugar con 43.415, según el informe publicado hoy el Instituto Nacional de Estadística. Se trata de casi cinco veces más que los 10.046 viajeros que contabilizó la comunidad el pasado año, nada más concluir el confinamiento domiciliario, y un 37,2 por ciento menos que la cifra alcanzada en 2019, antes de la irrupción de la pandemia (en junio de aquel año la autonomía recibió 78.154 viajeros. De los visitantes que llegaron a la región, el 95,9 eran españoles (47.056) y solo el 4,1 por ciento restante extranjeros.
En cuanto a las pernoctaciones, también se vislumbra una importante recuperación, aunque lejos aún de las cifras prepandemia. Así, Castilla y León anotó 104.669 a lo largo de junio, segunda en la clasificación nacional solo por debajo de los registros de Baleares (116.928), y más de cuatro veces por encima de las pernoctaciones del pasado año (23.835), aunque un 27,7 por ciento menos que en 2019. El 95 por ciento de las pernoctaciones contabilizadas en la Comunidad fueron protagonizadas por turistas españoles, y el 5 por ciento restante por extranjeros.