Los vecinos de la Rosaleda, al borde de la manifestación

La Asociación de vecinos de la Rosaleda denuncia los reiterados incumplimientos con la agrupación por parte del Ayuntamiento de Ponferrada sobre los acuerdos adoptados en reuniones con responsables del mismo «no se ha cumplido absolutamente nada», denuncia su presidente Pedro J. Villanueva. Por eso, en su última reunión han concretado medidas de presión como «bombardear de escritos el ayuntamiento y si tenemos que manifestarnos ante él también lo haremos», dice Villanueva.

Especialmente doloroso es que no se haya procedido a la colocación de las bandas de control de velocidad vial, sobre todo tras el atropello de tres menores a la salida del Auditorio Municipal «que pone en tela de juicio la responsabilidad del Ayuntamiento al respecto», dice el portavoz vecinal. Pero además, los vecinos se quejan del gasto realizado en el nuevo parque construido alrededor de La Rosaleda, porque consideran que 400.000 euros deberían haber dado para más que para los escasos juegos que hay en el «es una cutrez, no hay sombras y sigue cerrado».

Los vecinos consideran que, lejos de atender sus reivindicaciones, la pretensión es «mejorar la triste imagen de abandono del entorno dela Torre, declarado uno de los edificios más feos de España». No se procede al mantenimiento de parcelas públicas mientrasse produce «la indecencia de solicitar, mediante Bando Municipal,a los particulares que desbrocen las suyas con la amenaza de multas».

La agrupación mantiene vivas sus reivindicaciones que pasan por contar con un edificio de uso ciudadano desde el que estimular las actividades de la agrupación, una biblioteca y sobre todo, un colegio. «Hasta ahora sólo tenemos informaciones vagas sobre un edificio sanitario que se instalará en la explanada del antiguo Centro Comercial, todas las informaciones a través de los medios de comunicación, pero dudamos mucho de que se lleve a cabo y que termine en uno más de los proyectos para la ciudad que duermen en los cajones de los despachos de la Junta de Castilla y León», dice Villanueva.

Los vecinosdel barrio, compuesto por más de 4000 vecinos, lamentan que las reuniones que han mantenido con el Consistorio hayan sido papel mojado y amenazan con recordarlo ante las urnas.