Y cuando escribo lo de «los valores seguros» por supuesto que no me estoy refiriendo a Telefónica, Iberdrola o el Banco de Santander, por citar tres clásicos. No puedo hablar de ellos pues como escribía aquel cura de Canseco que era hermano de una recordada banquera leonesa «yo de economía lo único que sé es contar las monedas del cepillo y no me salen las cuentas con lo que estaba vigilando mientras los feligreses echaban en el cesto».
(Por cierto, ya que hablo de Iberdrola y estos y dado que exhumar a Franco flota sobre todas las conversaciones no me resisto a contaros una conversación de bar.
- ¿Tú dónde crees que deberían dejar a Franco?
- Lo más lógico sería en el Consejo de Administración de Endesa, como se ha hecho siempre).
Sigo tras el paréntesis. Vuelvo al suco de los valores seguros, que es una frase y un recurso del maestro Mauri: «Cuando no encuentres fotos, hay dos valores seguros para salvarlas: niños y perros». Se resiste a poner los toros porque es antituarino pero cuando llega San Juan y la feria...
Sabía que habría foto de perros pues estos tomaron la pasarela del Palacio de Exposiciones, con sus modelos, peinados... Pero ya avisó, los paisanos acostumbrados a tener perros para el trabajo y la vida cuando ven estas cosas ya musitan: «¿No nos estaremos pasando?». Yo no digo nada.
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