Los trabajadores de Maessa aceptan los despidos y no llegarán a juicio

Los trabajadores de la empresa Mantenimientos, Ayuda a la Explotación y Servicios (Maessa), una de las siete auxiliares que realiza actividad para Compostilla II y que negociaba 46 despidos por el cierre de la central, han aceptado las condiciones ofrecidas para no llegar a los juzgados por conflicto colectivo.

Con 22 votos frente a 19, los trabajadores afectadoshan aceptado condiciones como el traslado voluntario a otras zonas, con 600 euros más de salario el primer año, pero teniendo que desplazarse a zonas como Andorra, donde la central también podría cerrar, Ibiza, Cartagena o, más cerca a Vigo, As Pontes en Coruña o San Ciprián, en Lugo.Quienes no quieran desplazarse asumirán un despido con una indemnización equivalente a 25 días de salario por cada año de trabajo con un máximo de 13 mensualidades, una mejora en cinco días de salario a lo que marca la ley como mínimo.

Aun “con el bajón” que ha supuesto esta decisión, que imposibilita llevar a los juzgados un posible conflicto colectivo, asegura el portavoz de los trabajadores de estas empresas y empleado de Maessa, Alonso Roa, asegura que el campamento que mantienen a las puertas de la central para reclamar un plan social que les permita una salida digna de sus trabajos, seguirá adelante “para nosotros no cambia nada. No hemos llegado aquí para eso”, asegura.

Ahora sus esfuerzos se centrarán en conseguir que la Junta inste a la eléctrica a no proceder al cierre hasta cuando estaba previsto y autorizado, junio de 2020 y no febrero de 2019 “necesitamos conseguir ese tiempo”, reclama Roa, que asegura que es el compromiso que han arrancado de los políticos “les dimos una semana para que hubiera movimientos”, asegura y espera verlos en la reunión que también se mantiene del próximo martes en las Cortes de Valladolid con los representantes de todos los partidos que se sientan en ellas.