Los regantes ratifican el acuerdo para modernizar la infraestructura en el Bierzo

La asalmblea celebrada este domingo por la Comunidad de Regantes del Canal Bajo del Bierzo ratificó el apoyo a la modernización de la infraestructura de riego en la comarca, una propuesta que se consensuó el pasado mes de abril y que saldrá definitivamente adelante tras confirmarse el apoyo de una amplia mayoría de la comunidad.

Y es que el ‘sí’ a la modernización obtuvo 422 votos frente a los 180 que votaron ‘no’, una proporción semejante a la de la última reunión, en la que también se obtuvieron tres ‘síes’ por cada voto en contra.

Administraciones y sellos de calidad del Bierzo siempre se habían mostrado favorables a dar el paso definitivo hacia una modernización que consideraban imprescindible para que el sector agroalimentario en la comarca continuase con el crecimiento que ha experimentado en los últimos años y pasase a otro nivel.

Y es que pese a la gran acogida que tienen los productos de la comarca en el mercado nacional e incluso internacional –Los vinos de la DO Bierzo han multiplicado sus exportaciones y el mercado exterior es ya una pieza fundamental–, se ha criticado que la infraestructura de regadía esta «obsoleta» en muchas zonas.

Por su parte, el Ayuntamiento de Ponferrada también se mostró favorable a la modernización e incluso trató de convencer a los regantes sobre los beneficios que podía suponer dar el ‘sí’ a la propuesta.

La alcaldesa, Gloria Fernández Merayo ya se reunió con los regantes el pasado mes de agosto y avanzó que respaldaría la modernización, que consideraba que no se podía posponer más.

Y es que de retrasarse, los agricultores de la comarca ya no se podrían beneficiar de las ayudaseuropeas destinadas a la mejora de este tipo de infraestructura.

Así, las principales razones por la que un sector de los regantes se oponían a esta medida era la necesidad de realizar una concentración parcelaria en algunas zonas en las que según defiende es imposible de afrontar, por lo que supondría costear una nueva infraestructura de la que podrían no llegar a beneficiarse.

Según las estimaciones, la inversión podría rondar los 60 millones de euros y además del propio fortalecimiento del sector, supondrá además a creación de puestos de trabajo durante la ejecución de las obras.

La mayor parte de esta inversión sería afrontada a través de fondos europeos y la Junta de Castilla y León, por lo que los agricultores bercianos solo tendrían que afrontar una cuarta parte del presupuesto para una moderniación que abarcará 3.600 hectáreas.