Los refugiados de Villamanín limpian el pueblo como signo de agradecimiento

Los miembros de las dos familias acogidas en la localidad sorprendieron a los vecinos recogiendo diversos restos de basura

F. Fernández
08/04/2022
 Actualizado a 08/04/2022
Los miembros de las dos familias de refugiados ucranianos en Villamanín se dedicaron a limpiar diversos rincones del pueblo como signo de buena voluntad.
Los miembros de las dos familias de refugiados ucranianos en Villamanín se dedicaron a limpiar diversos rincones del pueblo como signo de buena voluntad.
«Por iniciativa propia y sin que nadie les dijera nada se han puesto  a recoger basura por diversos rincones del pueblo (Villamanín)para sorpresa de todos los vecinos ¡Qué grande es todo lo que está ocurriendo desde que han llegado». Con estas palabras explican desde el grupo de vecinos de Villamanín que han organizado la acogida de cinco miembros de dos familias ucranianas la sorpresa que se han encontrado al encontrar a Olona y Uliana, con sus hijos Vika, Sonnia y Vania recogiendo basura por el pueblo.

Era un signo de buena voluntad, una manera de agradecer a las gentes de este pueblo tantas muestras de solidaridad como han estado recibiendo. Olona y Uliana, Vika, Sonnia y Vania ya son nombres que se repiten en las calles de Villamanín. Poco a poco se van entendiendo cada vez mejor aunque la sonrisa sigue siendo el lenguaje universal, al cruzarse por las calles. Pronto se corrió la voz de que estaban limpiando el pueblo  y así renovaron y alimentaron esa voluntad de que nada les falte en su estancia leonesa. Ya llevan casi tres semanas aquí y las historias que cuentan los vecinos hablan de la buena sintonía. Cada cual tiene una anécdota y se siguen sucediendo los gestos de ayuda, vecinos que les hacen dulces o les dejan regalos en alguna parte además de los lugares de recogida de ayuda.

Nuevamente han usado las redes sociales para comunicarse y las dos familias de refugiados colgaron en un grupo de Facebook de Villamanín y vídeo recogiendo basura, al que los vecinos han reaccionado con numerosos comentarios agradeciendo su gesto y mostrándoles una vez más su apoyo. Comentarios que se podrían resumir en un par de ellos: «Poco a poco os estáis integrando» o «siempre bienvenidos. Un abrazo».

Pues eso.  

Legalizados como asociación con la posibilidad de acoger más refugiados


La rapidez con la que los vecinos de Villamanín dieron respuesta  a la solicitud de ayuda para acoger a un grupo de refugiados que huían de la cruel invasión rusa de su país, Ucrania, hizo que tampoco tuvieran excesivo tiempo para atender  asuntos burocráticos; aunque sí pudieron legalizar rápidamente su presencia con la obtención de los documentos necesarios, como el carnet de identidad o centros escolares a los que acudir.

Ahora le ha tocado el turno al grupo de vecinos que se formó de manera espontánea para que llegaran. Ya se han constituido como Asociación  y ha  abierto una cuenta solidaria pues todo apunta a que, tristemente, la estancia de los refugiados se prolongará. Además no descartan «poder traer a más refugiados en el caso de que sea necesario».  
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