Los que sí hicieron los deberes

No es que a los españoles nos hagan falta más ejemplos de que algunos de nuestros problemas quedan muy por detrás de los intereses de sus partidos, pero con el uso de los remanentes de ayuntamientos y diputaciones ha quedado más que de manifiesto. En primer lugar, el Gobierno orquestó una fórmula (según la ministra la única posible) para saltarse la Ley Montoro (la que contuvo el desorbitado endeudamiento de muchos ayuntamientos en el 2008) y que así los consistorios pudieran ceder al Gobierno sus remanentes, que les serían devueltos durante los próximos ejercicios. Las directrices de los grandes partidos fueron evidentes: todos los del PSOE estaban a favor y todos los del PP en contra. Tras el contundente no del Congreso, ayer se hizo posible lo que la semana pasada era imposible, y el Gobierno anunció un decreto ley para suspender la regla de gasto y que los consistorios y diputaciones puedan, al menos, gastar sus superávits de 2018 y 2019. La situación social de los españoles derivada de la crisis del coronavirus es ya tan urgente y va a serlo muchísimo más en los próximos meses que no deberían caber criterios de color político para buscar soluciones, y obviamente una solución es poder invertir el dinero que hay en las arcas de las instituciones más afortunadas... o aquellas que han hecho mejor sus deberes.