En este contexto, desde EspañaDuero apuntan que en el último año se ha observado un descenso generalizado en el número de beneficiarios en Castilla y León, si bien más notable en las provincias de Ávila y Zamora, con disminuciones en la cifra de perceptores del 14,0% y 13,5%, respectivamente, en comparación con 2016. También en León y Palencia la reducción en el número de beneficiarios fue destacada (-12,8% y -10,0%, respectivamente).
Por otra parte, el descenso en el número de beneficiarios y el leve incremento del importe total de las ayudas recibidas ha implicado un incremento del importe medio recibido por beneficiario. Así, en 2017, la ayuda media percibida por explotación se sitúa en 13.355 (11.793 euros en 2016), siendo más elevada en las provincias de Valladolid, Palencia, Salamanca, Soria y Burgos (entre 17.792 y 13.804 euros en 2017). Por su parte, en las provincias de Zamora, León (10.776), Segovia y Ávila oscila entre los 9.049 y 12.655 euros, por debajo de la media de la comunidad autónoma.
Estas cifras respaldan algunos de los debates que están en boga dentro de las negociaciones de la reforma de la PAC, como el del ‘capping’, el establecimiento de límites a las cuantías que pueden recibir los perceptores, a fin de evitar desequilibrios. De los límites que se manejan, de 60.000 euros, quedarían excluidos la gran mayoría de los agricultores y ganaderos leoneses y afectaría principalmente a empresas y organismos públicos con importantes extensiones de terreno.
Sin embargo, como explica el informe, centrando la atención en los perceptores de las ayudas de la PAC, León, Zamora y Burgos son las provincias que acumulan un mayor número de beneficiaros, superando los 14.000 en León (en 2016 fueron más de 16.000). Por el contrario, el número de beneficiarios es bastante más reducido en las provincias de Soria (5.791 expedientes), así como en las de Palencia, Segovia y Ávila, que cuentan con un número aproximado de 7.000 u 8.000 beneficiarios.