Los personajes del tío Ful: Celerina Ferrero, panderetera de Velilla de la Reina

Hay un encuentro de pandereteras y la nuestra Teresa Giganto también se suma al sarao. Allí está una de las ilustres del instrumento, Celerina la de Velilla. Vuelve emocionada.

- ¿Qué tal Celerina?
- Dios, ¡vaya hebra que tiene Celerina!

Buena definición. Se lo digo a Celerina y da por bueno el piropo: «Hebra sí tengo».

Pero podía dar por buenos otros muchos adjetivos: panderetera, verseadora, colaboradora, dispuesta, trabajadora, y buena gente, muy buena...

Lo lleva todo puesto desde niña. Desde niña empezó a trabajar en casa —«y de lo duro»—, desde niña conoció los bailes ycanciones de su único pueblo —«soy nacida, criada y casada en Velilla»— y desde niña se dio cuenta de que se le quedaban bien las canciones y romances del pueblo. «Y como lo bien aprendido no se olvida, ¿qué quieres, que cante, que toque o te recito un romance?».

Y lo hace, porque al margen de su excelente memoria no pasa mucho sin que algún estudioso pase por su casa para que le cante canciones o le recite viejos romances.

— ¿Y trabajaste mucho?
— Más del cupo que tenía, pero eso déjalo, que ya pasó.

Es así Celerina, capaz de celebrar sus bodas de oro llegando a la iglesia en un carro tirado por un burro, «como toda la vida fue» y capaz de crear algunos escritos que emocionan a gente como Manu Ferrero: «Me enseñó una historia que te pone los pelos de punta, de cómo encuentra en un cuarto las muñecas y juguetes de los hijos y a través de ellos va rememorando cómo los crió y cómo era la vida entonces».

¡Menuda hebra tiene Celerina!