Los Payuelos siguen esperando

Avanzan en el Páramo leonés las hectáreas de cultivos modernizados al tiempo que redoblan esfuerzos sus agricultores para subirse al tren del futuro del regadío. Ellos han sabido adaptarse a los cambios, aferrándose en buena parte de los casos a la financiación bancaria para poder afrontarlo. Son conscientes de que el futuro en la comarca pasa por un uso más eficiente del agua y también saben que de ello depende que sus hijos puedan quedarse en la tierra en la que nacieron para seguir labrando la tierra. Quienes renegaron en un primer momento de la modernización lamentan ahora, que ya se han decidido a ello, que los plazos sean tan largos para que se vea materializada. Y así mientras unos se ahogan con los créditos para pagar el mobiliario de las fincas de regadío modernizado, otros se ahogan mirando a la pala y al sifón hasta que les llegue el turno de la modernización. Otro caso bien diferente es el de Los Payuelos, que se ahogan esperando a que llegue la ansiada y prometida modernización para no tener que ver cada día como se van los jóvenes de la zona buscando oportunidades al tiempo que el agua de Riaño corre hacia otras provincias por un Canal al que aún le queda mucho para cumplir el cometido que le corresponde. Los Payuelos siguen esperando y corren el riesgo de que cuando acaben sus obras de modernización (quién sabe con cuántos años de atraso) alguno se haya cansado de esperar. Ojalá pronto sean un vergel como el Páramo Bajo.