Los caballeros (y damas) de la mesa ovalada

Me van a perdonar, pero tengo que confesarles que nada más ver las imágenes de la primera reunión de la ‘Mesa por León’ irrumpieron inmediatamente en mi cabeza los Monty Python y su inolvidable ‘Los caballeros de la mesa cuadrada’. Eso sí, con la variación de que para la versión leonesa se ha contratado al mítico Kristian de Bricomanía para tunearla y convertirla en ovalada. Otra diferencia es que en la película de los Monty Python el rey Arturo y sus caballeros buscaban el Santo Grial, algo que al menos en León ya hemos encontrado. Aunque en la actualidad, nuestro verdadero Santo Grial sería encontrar la fórmula exacta para llenar de esperanza y de futuro a nuestra provincia.

El 16-F el pueblo habló y el 3-M comenzó oficialmente la carrera a contrarreloj para dar solución a los muchos y variados problemas con los que convivimos los leoneses. Algo nos hemos perdido por el camino o si no, es incomprensible de que en un primer momento se hablara de constituir una mesa con pocos participantes para así favorecer su agilidad y eficacia y al final resulta que se presentaron en el Palacio de los Guzmanes 22 caballeros y 3 damas. En relación a la paridad, si pretendían hacer un homenaje a la época medieval, objetivo conseguido. Y en cuanto al número, pocas explicaciones le encuentro, salvo que pretendieran que el Ministerio de Sanidad suspendiera la reunión por el coronavirus al entenderlo como un evento masivo. Eso sí, en caso de que luego las cosas no salgan como esperamos todos los leoneses, que luego algunos de los allí presentes no quieran descargarse de responsabilidad diciendo que iban de meros oyentes.

Todos los participantes coincidieron al definir como crítica la situación actual de la provincia leonesa. Solo faltaba que alguien insinuara alguna duda al respecto. Lo que sí es extraño entonces es que si desde la Junta de Castilla y León y el Gobierno de España son conscientes del negro presente de nuestra tierra por qué no han tomado medidas antes. Pero bueno, como en la ‘mesa ovalada’ se ha decidido no mirar al pasado y perdonar tropelías pretéritas para trabajar desde la lealtad, olvidémonos de este pequeño detalle y miremos al futuro con optimismo. Los caballeros y las damas han acordado que la solución pasa por el diálogo social. En teoría esto suena bien, pero habrá que estar vigilantes para que no sea mera retórica.

Otro de los acuerdos, a mi juicio acertado, es crear una agencia encargada de coordinar fondos y estrategias para el desarrollo de la provincia en los próximos diez años en la que trabajarán técnicos de la Diputación de León. Pero la clave es que dicho ente será dirigido por un profesional con experiencia, elegido por consenso y lo más importante ‘no político’. Eso sí, puede haber muchos y buenos profesionales coordinados por un gran experto, pero de nada valdrá si no disponen de los millones de euros que necesitamos para despertar de la pesadilla actual.

El último reto al que se enfrentan los protagonistas de ‘Los caballeros de la mesa cuadrada’ es en el puente de la muerte, donde un guardián harapiento les balbuceaba «Quien el puente desea atravesar, tres preguntas deberá contestar, o al abismo irá a dar». Así que me voy a convertir en dicho guardián para formular también tres interrogantes. ¿Acertarán al elegir al rey o a la reina que liderará la búsqueda del verdadero Grial que necesitamos? ¿Serán nuestros dirigentes capaces de apoyar económicamente y comprometerse con planes a diez años cuando su esperanza media de vida política es en muchas ocasiones menor? ¿Nos convertiremos en un caso de éxito que se estudiará en el futuro como el de las Highlands en Escocia o nos tendremos que hacer el harakiri con la espada Excalibur?