Los 5 lenguajes del amor

Mi hermano David, profesor de Matemáticas y Economía en el colegio El Romeral (Málaga), que imparte sesiones sobre cuestiones relacionadas con la orientación familiar y las comenta en su blog ‘Vagón para dos’, –nos venía hablando de un libro, ‘Los 5 lenguajes del amor. El secreto del amor que perdura’, de Chapman– desde hacía tiempo. Pero no me lo he leído hasta que, escribiendo recuerdos por el fallecimiento de mi padre, el pasado 14 de marzo, caigo en la cuenta de que ese día, en el almuerzo, centró gran parte de la conversación. Y me ha encantado.

La preparación académica de su autor, Gary Chapman, es la antropología, y más en concreto la lingüística. Por eso, centra la continuidad del amor en la pareja en los distintos lenguajes que cada uno tenemos de recibir y expresar el amor. «Tu lenguaje emocional del amor y el de tu cónyuge tal vez sean diferentes como el chino del español. No importa cuánto te esfuerces por tratar de expresar amor en español; si tu cónyuge solo comprende el chino, nunca entenderán cómo amarse el uno al otro». Se trata de descubrir cuál es tu lenguaje primario del amor y el de tu cónyuge. Como rara vez un esposo y una esposa tienen el mismo lenguaje primario de amor y uno tiende a hablar su propio lenguaje primario, el cónyuge no entiende lo que le comunicamos. ¿Cómo vamos a mantener lleno, entonces, ‘el tanque del amor’? Porque, la fase de enamoramiento, de ‘obsesión romántica’ suele durar dos años. ¿Y, después?

El punto principal del libro es el amor racional y volitivo, «la clase de amor a la que los sabios nos han llamado siempre. Es intencional» y es una buena noticia para las parejas casadas que han perdido sus sentimientos de enamoramiento. El amor es la actitud que dice: «Estoy casado contigo, y decido velar por tus intereses». Luego, el que decide amar encontrará maneras adecuadas para expresar esa decisión.

Después de muchos años de ‘consejería matrimonial’, llega a la conclusión de que existen cinco lenguajes emocionales del amor, y dentro de ellos hay muchos dialectos:
Primero: palabras de afirmación.
Segundo: actos de servicio.
Tercero: regalos.
Cuarto: tiempo de calidad.
Quinto: toque físico.

El libro finaliza con una especie de test con treinta pares de afirmaciones donde, de alguna manera, se destacará tu lenguaje primario del amor. Se trata de conocer, después, cuál es el de tu pareja y manos a la obra.