Llegar y marchar sin debutar, una costumbre en la Cultural

Nueve de los jugadores fichados en los tres últimos veranos han abandonado ya el club sin llegar a formar parte de la plantilla ni media temporada

Jesús Coca Aguilera
03/09/2020
 Actualizado a 03/09/2020
Soler, Irureta o Pito Camacho han sido tres de los casos de los últimos años. | MAURICIO PEÑA
Soler, Irureta o Pito Camacho han sido tres de los casos de los últimos años. | MAURICIO PEÑA
Fichar jugadores que acaban siendo rescindidos antes de empezar la liga, o saliendo cedidos y siendo cortados al año siguiente. Es una situación anómala pero que se ha convertido en habitual en los últimos años en la Cultural, donde sólo entre las incorporaciones de los tres últimos veranos hay ya nueve que han terminado dejando el club sin llegar a formar parte de la plantilla ni media temporada.

Llegar y marchar sin debutar es una costumbre ya en el conjunto culturalista, que se ha visto obligado a ‘rascarse el bolsillo’ y llegar a acuerdos en muchos de los casos, los dos últimos cerrados durante la última semana.

Es el caso del lateral derecho Soler, al que ficharon por dos años en 2019 pero, tras enviarle cedido al Olot la pasada campaña, llegaron a un acuerdo en esta para rescindir su contrato y que vuelva al equipo catalán; y también del delantero Antonio López, el único de los ocho que sí llegó a estrenarse, jugando cinco minutos en el primer partido de liga días antes de irse cedido a dos destinos diferentes, y al que tras firmar por tres temporadas decidieron rescindir el lunes un contrato al que aún le quedaban dos años más de duración. Curiosamente su destino estará a las órdenes de uno de los técnicos que estuvo cerca de la Cultural, Raúl Casañ, pues ha firmado por la Peña Deportiva de Segunda B.

Soler, Antonio López, Renato, Blaise, Fer Ruiz, Irureta, Magallán, Agudo y Pito Camacho forman la lista También dos casos similares se dieron la campaña anterior. Así el delantero Renato, fichado en 2018 y que tras el verano se había ido cedido al Badajoz, era rescindido y acababa en un Yeclano con el que luego se medía en el ‘playoff’ de ascenso a los leoneses; mientras que en uno de los casos más oscuros el central Jordan Blaise, cuya incorporación nunca llegó a anunciar a la Cultural, era cedido hasta Navidad al Unionistas, que fue quien hizo público el préstamo de los leoneses, y luego acababa la temporada en el Astorga.

En ese verano también acabó su vinculación con la escuadra culturalista sin llegar a debutar Santiago Magallán, a quien en 2017 ficharon por tres temporadas. Sin embargo su caso es algo distinto, pues en la pretemporada de su estreno se lesionó de gravedad, pasándose un año en blanco sin tener la ficha dada de alta antes de que al siguiente le cedieran al Badalona y luego le rescindieran, acabando en el Llagostera.

En los 3 últimos años, sólo José Alonso llegó a formar parte de la plantilla después tras ser fichado y cedido Un año antes, en 2018, hubo dos jugadores que tras firmar no llegaron a empezar la temporada. Se trató del meta Irureta, que en una campaña en la que los leoneses acabaron teniendo muchos problemas con su portería brilló en el Sanse; y de Fer Ruiz, que sólo hizo un mes de pretemporada antes de tener que negociar el club una salida ante el ‘overbooking’ de fichas.

Por último, también ese año rescindieron a Iván Agudo, que había sido cedido a Lleida y Recreativo tras fichar y no contar en el año de Segunda, en el cual Pito Camacho se unió a la lista de los firmados y rescindidos en el mismo verano.

Diferente es por ejemplo el caso de Estellés, rescindido este martes y que estuvo toda la primera vuelta pasada en el equipo aunque sin oportunidades, y que no convenció eso sí en una cesión de la que sólo en su día José Alonso, y quizá también esta campaña Diarrá, han conseguido volver ganándose una ficha a una Cultural que ha convertido en hábito los casos que más atrás en el tiempo, con Miñambres o Higinio, eran anécdota.
Archivado en
Lo más leído