León y Álava

Acaban de publicar los datos de afiliación de la Seguridad Social de noviembre. La media del mes en España es de 18.945.000 cotizantes, que es el máximo histórico nunca registrado en este mes del año. En el caso de León es de 158.000 cotizantes, lejos del máximo histórico de 181.000 (2007) y en cifra similar a 2003. León sigue sin crecer al ritmo medio interanual de España.

Para conocer la coyuntura de León podemos compararlo con provincias que tenga un número similar de cotizantes. La más parecida es Álava, de la que León difiere en unos cien. Para empezar Álava tiene 329.000 habitantes. León tiene 463.000 según el padrón municipal de 1 de enero de 2018. Esto ya demuestra que hay alguna disfunción en una o en las dos provincias. Dicho de otra manera, si León fuese como Álava tendría 135.000 habitantes menos.

En Álava hay 76.000 pensionistas (de pensión contributiva), algo más de la mitad que en León: 142.000. Esto quiere decir que buena parte de la diferencia de habitantes se debe a las personas solas y parejas perceptoras de pensiones que prefieren León. Por lo tanto la sociedad leonesa es mucho más mayor que la alavesa.

Otro aspecto de esta comparativa es en qué trabaja la gente. En León hay 115.000 cotizantes al régimen general, es decir, que trabajan por un salario en sectores normales. En Álava hay 133.000, lo que supone que las empresas alavesas son más grandes y emplean más asalariados. En León hay casi 32.000 autónomos mientras en Álava son 19.000. Esto supone que los leoneses se buscan más la vida para quedarse aquí. En Álava hay menos iniciativa empresarial que en León como demuestra el dato. En el campo alavés trabajan 2.500 personas y en el leonés 8.000 (apenas el 5% de los leoneses). No hay diferencia significativa en los trabajadores del hogar y ya solo quedan 300 cotizantes al régimen especial del carbón en León.

Hay que señalar que ni Álava ni el País Vasco son lugares con un crecimiento notorio. Mantienen niveles de renta por encima de la media, pero su población se ha estancado y la masa laboral crece por debajo de la media. El País Vasco supone solo un 5% de la masa laboral de España. Hablamos por tanto de territorios que carecen del vigor de Alicante, Málaga o Baleares, lugares de referencia como centros de crecimiento españoles.

En conclusión, León es un lugar con mucha capacidad creativa y un campo potente, pero con un tamaño empresarial medio pequeño, cuestión central en nuestras prioridades de promoción industrial. Que no falten los jubilados que retornan desde sus destinos de emigración. No se valora lo suficiente cuánto nos ayudan.