León vuelve a la élite bajo el mando de Félix Alonso

León sigue añorando el baloncesto de élite cada temporada, pero por suerte tiene a referentes que le hacen estar presente en él y al menos hace que los aficionados mantengan un ojo en categorías a cuyos equipos le son desde hace demasiado tiempo ajenas. Ahora, más de dos décadas después de que un leonés dirigiera a un equipo en la élite, Félix Alonso tomará el relevo de José Alberto Pesquera (Caja San Fernando, Granada o Cáceres) al coger las riendas del San Pablo Burgos después de la destitución de Zan Tabak.

Alonso, que había llegado este verano al doble campeón de la Champions League precisamente de la mano del croata, del que también fue ayudante en elZielona Góra de Polonia, se hará cargo del conjunto burgalés de forma interina junto al también miembro del cuerpo técnico Fran Hernández, en principio hasta que el club encuentre a un nuevo entrenador. El leonés debutará al frente del equipo este mismo miércoles en la visita del Burgos al Oldenburg alemán en partido correspondiente a la Champions League, en la que defiende título y lidera por el momento su grupo con dos triunfos y una derrota.

El técnico asegura asumir este nuevo reto «con naturalidad, estoy evidentemente triste por el hecho de que un entrenador que además es un buen amigo pierde su trabajo, pero esta es la regla de este negocio». Confiesa que el club le ha transmitido que se hace cargo del equipo «de forma temporal, por el momento para el siguiente partido, pero que pueden ser dos o pueden ser cinco».

Es una situación triste porque además de un entrenador pierde el trabajo un amigo como es ZanAdemás de partido de Liga de Campeones, no tendrá fácil el liderar la reacción de un Burgos que tiene solo un partido de margen sobre el descenso en la Liga ACB. Y es que en caso de continuar, su primer rival en la competición doméstica será nada menos que el F.C. Barcelona el próximo domingo. Así, se marca como objetivo el técnico «reforzar al equipo anímicamente, creo que en trabajo que hacemos y no sería ni coherente ni leal trabajar con un entrenador y cambiarlo todo, hay que gestionar las situaciones que el equipo está viviendo para no rompernos en ese aspecto y si ganamos en Oldenburg nos pondremos en una situación beneficiosa».

Y es que explica Alonso que el momento por el que pasa el equipo se debe a «tener la sensación de que no podemos ganar un partido más allá de que compitamos, enganchamos 4 triunfos seguidos con buen juego, pero ahora parece que el equipo no está preparado para ganar, la llegada de Julius Gamble nos va a equilibrar y necesitamos rearmarnos anímicamente, porque quizás hay jugadores que no estaban acostumbrados a la presión de venir a un club que ha ganado dos Champions y una Intercontinental».

Porque es máxima la exigencia en este Burgos campeón de Europa en un reto que asumieron en verano «sabiendo que era muy complicado sustituir a Joan (Peñarroya), llegamos tarde al mercado y hay bastantes jugadores nuevos en la competición que con la exigencia que hay en la liga tampoco ayuda a la adaptación. Estamos ajustando algunas cosas a ver si somos capaces de enderezar el rumbo hasta que el club encuentre un sustituto».

Por el momento, el baloncesto leonés tendrá a uno de los suyos en la élite y eso es sin duda motivo de alegría para todo el deporte provincial.