El alcalde de León, José Antonio Diez, y el secretario de la organización a nivel nacional, Daniel-Anibal García, fueron los encargados de presentar los detalles de este nuevo sistema de comunicación entre las personas con discapacidad y el Ayuntamiento que busca lograr "una ciudad más justa y solidaria" orientando las actuaciones hacia una accesibilidad integral, el "objetivo a largo plazo", aseguró Diez.
El alcalde puso el foco en continuar trabajando en la eliminación de barreras arquitectónicas, para lo que ya se invirtió cerca de 80.000 euros hace unos meses para llevar a cabo 50 acciones en toda la ciudad en las que se está trabajando en la actualidad tras las demandas de colectivos y vecinos de cada barrio. A las diferentes vías de comunicación que los leoneses tienen con el Ayuntamiento, se une ahora esta aplicación "puntual y exacta" en la que geolocalizar un bordillo no rebajado, un semáforo no sonoro o una terraza que impide el paso de una silla de ruedas, entre otros obstáculos que se pueden encontrar a diario las personas con discapacidad.
Por su parte, el secretario de Cocemfe aseguró que las ciudades pueden ser "un entorno en el que nos sintamos excluidos" y por eso hay que trabajar para crear "entornos cómodos" y accesibles en los que se puedan llegar a 'olvidar' de esta discapacidad. La 'app', puesta en marcha por Cocemfe, pretende ser un espacio de "reivindicación" en el que también "se propongan soluciones", explicó García. Una iniciativa encaminada a hacer de León "una ciudad accesible", lo que significa "ser más amigable".
Un 7 en accesibilidad
Además, el defensor del discapacitado en León, José Manuel González Pozo, recordó los avances en accesibilidad en los últimos años y puso un 7 de nota a la ciudad en esta materia. "Soy optimista", aseguró recordando que desde que él sufrió el accidente hace casi cuatro décadas la ciudad ha cambiado. Sin embargo, apuntó a que en ocasiones las obras que se realizan para mejorar "no quedan bien" y mantienen el problema.Por último, García recordó a las personas que se encuentran "encerradas en su casa", en edificios inaccesibles sin ascensores ni rampas, para lo que pidió "un fondo estatal" que permita solucionar la problemática en la que no pueden intervenir las instituciones al tratarse de espacios privados pero que sufren "más de 10.000 personas en todo el país".