León no quiere perder el tren

Sin fecha fijada para ser utilizada por los trenes-tranvía (pese a estar terminada desde hace tres años y medio), la nueva plataforma de Feve sirvió durante la tarde de este jueves para integrar la protesta convocada por la Asamblea en Defensa del Ferrocarril en la Provincia de León.

Se trataba de una marcha simbólica de integración de la red de ancho métrico que lleva ya más de diez años sin llegar hasta el centro de la capital. El apeadero de La Asunción fue el punto de inicio de un recorrido que llegó hasta la estación de Matallana.

Este acto se enmarcaba en una serie de actos y movilizaciones que recorren todo el país por ser 2021 el Año Europeo del Ferrocarril. En este sentido, el objetivo pasaba por reivindicar un transporte ferroviario público, social, con empleo estable y que vertebre el territorio de una forma respetuosa con el medio ambiente.

Desde la organización recuerdan que el desarrollo de la provincia de León ha estado históricamente ligado al ferrocarril como nudo de interés en el transporte de mercancías y viajeros, con servicios para unir comarcas, pueblos y ciudades. Denuncian además que León ha perdido en las últimas décadas una serie de infraestructuras y, al mismo tiempo, de posibilidades de desarrollo por medio del ferrocarril.

Pero la integración de Feve es solo una de las reivindicaciones planteadas durante la marcha simbólica. A este proyecto se suman la recuperación de las frecuencias de Renfe anteriores a la pandemia, el impulso definitivo de la plataforma logística de Torneros (sin renunciar al traslado de los talleres ferroviarios de material motor y material remolcado) y también de la de Toral de los Vados, la reapertura de la Ruta de la Plata para apostar por un desarrollo no radial de las infraestructuras en España, la intermodalidad entre las estaciones de autobuses y trenes de la capital, recuperación real y el impulso del tren Ponferrada-Villablino, el aumento de las circulaciones de Obligación de Servicio Público hacia y desde El Bierzo, el soterramiento en San Andrés del Rabanedo, la mejora de la línea Palencia-A Coruña y su potenciación como eje del Corredor Atlántico (ampliación de apartaderos, mejora de túneles, trincheras y taludes) y la implementación de núcleos de cercanías o regionales en León y Ponferrada con horarios cadenciados y estaciones intermodales bus-tren, así como una tarjeta única de transporte.