Y en el caso de la provincia de León, los diez más ‘multones’ detectarona un total de 27.769 conductores circulando a una velocidad superior a la permitida. Esto deja una media superior a 75 sanciones cada día, siempre según el análisis de los datos del citado informe.
Se lleva la palma el radar ubicado en la A-66 a la altura del municipio de Valdevimbre (concretamente, en el punto kilométrico 160,5). Durante el pasado año cazó a 8.930 conductores (25 al día) pese a que su actividad registró un notable descenso con respecto a 2018, periodo en el que había detectado un total de 20.852 infracciones referidas a la limitación de velocidad.
Mientras, cabe destacar que el segundo radar más ‘multón’ de las carreteras leonesas se encuentra en el kilómetro 347,9 de la A-6, a la altura del puerto del Manzanal. Concretamente, los datos de AEA reflejan que el pasado este dispositivo cazó a 7.858 conductores (21 cada día de media) frente a los 10.497 que figuraban en el informe referido al balance de 2018.
Además, estos dos dispositivos de control de velocidad se cuelan entre los más sancionadores de toda la comunidad, ya que ocupan el sexto y el séptimo puesto respectivamente.
Es preciso señalar que el podio de los radares más ‘multones’ de la provincia lo completa el dispositivo de control de velocidad de tramo situado en la carretera N-630 (entre los kilómetros 132 y 137,5). Está en el conocido como alto de la Copona y acumuló el pasado año un total de 4.822 sanciones (13 al día).
Por detrás se sitúa el radar de tramo de la N-120 entre los puntos kilométricos 309 y 317,6, zona que corresponde con el municipio de Villadangos del Páramo. Durante el pasado año impuso un total de 2.608 multas.