Las limitaciones en la movilidad hunden las reservas turísticas del puente en León

Épocas del año como los puentes del Pilar, de Todos los Santos y de la Constitución y la Inmaculada o como las fiestas navideñas eran hasta este año sinónimo del cartel de ‘completo’ para los hoteles de la provincia y para los alojamientos de turismo rural.

Pero la pandemia ha hecho, como en casi todo, que la cosa haya cambiado radicalmente. Buena muestra de ello son por ejemplo los datos que aporta el presidente de la Unión Hotelera de León y director del Alfonso V y el Conde Luna, Manuel García, que cifra en un máximo de un 20% la ocupación para estos días. Recuerda que hay además muchos hoteles que siguen cerrados y que una vez que otros pararán su actividad después del puente. «El resto de diciembre y enero son una época mala para nuestro sector, porque muchos viajantes y personas que vienen por negocios cogen vacaciones en las fiestas navideñas», apunta finalmente García.

Mientras, desde la Asociación Leonesa de Turismo Rural (Aletur) explican que el nivel de reservas se ha quedado también en un 20%. En este sentido, se preveía llegar inicialmente a un 50%, pero el anuncio de las últimas limitaciones a la movilidad –solo pueden venir visitantes de Ávila, Salamanca y Segovia– provocó el pasado martes un número importante de cancelaciones.

En todo caso, los niveles de ocupación pueden variar en función de las diferentes comarcas. En este sentido, las estaciones de esquí suelen ser un factor determinante, aunque este año no será así por no haber abierto aún ante la falta de precipitaciones. «Influye también el gusto de los viajeros, la visibilidad de cada zona, sus recursos naturales y también actividades complementarias como el turismo activo, la cultura o el ocio», explica a este periódico el nuevo presidente de Aletur, Pedro Flecha, que accedió al cargo el pasado 14 de noviembre y que valora también los datos de ocupación referidos al pasado mes de octubre y publicados esta semana por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Concretamente, el número de viajeros se redujo un 62,3% en la provincia hasta situarse en 3.815 (en octubre del pasado año habían sido 10.137). Mientras, los datos referidos a pernoctaciones establecen un total de 7.419, lo que se traduce en una caída del 53,7%, puesto que el dato conocido hace un año ascendía a 16.038. «Los puentes del Pilar y Todos los Santos fueron muy flojos a raíz de cierres perimetrales y restricciones de movilidad anunciados con poco margen de maniobra. Tanto los empresarios de los alojamientos como los viajeros necesitamos tiempo para poder organizarnos», comenta Flecha.

Respecto a las previsiones para las fechas navideñas, otro de los momentos del año con mayor tirón, especialmente en Nochevieja y Reyes, el presidente de Aletur asegura que las reservas están «paradas». «Hay algunas llamadas para informarse, pero siempre aseguran que todo está pendiente de ver cómo quedan las restricciones que se están ultimando para esta época y si va a seguir habiendo cierres perimetrales entre comunidades o provincias. Van a esperar a conocer todo esto antes de organizarse», detalla finalmente Flecha en declaraciones a este periódico.

En cualquier caso, el turismo rural cerrará un año aciago en la provincia de León como consecuencia de la pandemia. Si se examinan los datos referidos a los diez primeros meses, la principal conclusión es que se ha registrado una caída del 58,5% en cuanto al número de viajeros alojados en este tipo de establecimientos. Han sido concretamente 46.433 frente a los 111.960 contabilizados entre enero y octubre de 2019.

Mientras, en cuanto a las pernoctaciones, la estadística las cifra en 120.961, dato que representa un descenso del 41,2% en comparación con las 205.882 que se habían contabilizado durante los primeros diez meses del pasado año.