Las lágrimas de la Virgen de la Encina ‘brotan’ en La cárcel

Alma Ruth Magallanes Veha es una artesana del vidrio con soplete que crea sus piezas en directo en la tienda taller La cárcel, en el centro de Ponferrada, a la sombra de la vieja cárcel que hoy es museo. Allí lleva más de veinte años ‘haciendo cuentas’, que "cuando empecé éramos cuatro en España"

Fulgencio Fernández
06/03/2022
 Actualizado a 06/03/2022
Alma Ruth Magallanes trabajando en su taller de artesanía del vidrio con soplete La cárcel, donde realiza sus creaciones como un taller abierto. | F. FERNÁNDEZ
Alma Ruth Magallanes trabajando en su taller de artesanía del vidrio con soplete La cárcel, donde realiza sus creaciones como un taller abierto. | F. FERNÁNDEZ
En la restauración de la Virgen de la Encina de Ponferrada, la patrona del Bierzo, una de las piezas deterioradas eran sus lágrimas que, además, parecían excesivamente grandes. Buscan quién las pueda hacer por diversos lugares, en el taller sevillano que habían hecho las anteriores y resultó que la solución estaba... en Ponferrada, en la pequeña tienda y taller de artesanía La cárcel, a la sombra de la torre del reloj, donde lleva más de dos décadas trabajando "en vivo y en directo" la artesana Alma Ruth Magallanes Vega, quien realiza trabajos en vidrio —cuentas o perlas— con soplete y recibía con emoción el encargo. "Después de muchos años trabajando en la elaboración y restauración de vitrales en las iglesias… Al fin me llega un trabajo de restauración de imaginería religiosa. La restauradora me cuenta que las lágrimas que tenía colocadas eran demasiado grandes y con el tiempo se le habían caído. Así que me pongo ‘manos a la obra’ y ya lucen en la querida imagen ponferradina".

Podía ser una metáfora de la realidad, la solución, una excelente artesana, está ahí, en el centro de la ciudad, en La cárcel, un nombre también cargado de significado, según cuenta Alma Ruth, que comenzó trabajando con su hermana y ya lleva tiempo en solitario. "Aquí al lado estaba la cárcel, hoy Museo, en la que tristemente estuvo nuestro abuelo que aunque era panadero le acusaron de traficar con armas.El abuelo le dejó al carcelero una carta para mi abuela, con el anillo de boda. La carta le llegó pero el anillo no y en ella le decía que nunca había traficado con armas, que él era panadero. Pero lo fusilaron". También el local que ocupa tiene mucho significado para ella pues, además de la bodega de la cárcel, "fue la casa de mi tía abuela, lo que hace que también sea especial para nosotras".

La berciana participó de otros mundos, estudió Diseño Gráfico en Barcelona, trabajó durante seis años en una empresa de publicidad... "hasta que en el año 2001 descubrí la fascinación de la vidriera artística en un taller que se impartió aquí en Ponferrada y al que acudí". A partir de ahí comenzaron los nuevos pasos, más talleres, más maestros, a comprar vidrios, el soplete, el horno, hacer cuentas... "y hacer y hacer y hacer. El ensayo/error es la mejor escuela para quien tiene espíritu investigador".Verla trabajar en directo y escuchar sus explicaciones es una especie de mezcla de clase de arte, alquimia, colores, química, fuego y mucha pasión: "Empezamos con una varilla de acero de uno de estos colores, calentamos una barra de vidrio con el soplete y se va depositando sobre la varilla, para los puntos o hilos decorativos usamos hilos de metales compatibles con el vidrio, después de decorarlo pasamos al recocido..." y así sigue explicando un proceso que desemboca en collaradas o rosarios de joyería tradicional y colecciones de todo tipo: calaveras, arlequines, personajes, llaveros, colgantes, lo que imagines. "Soy un ‘peligro’ cuando encuentro a alguien que lleva joyería tradicional pues le pido permiso para reproducirla en cristal. También me fijo mucho en libros, en los trajes populares... la inspiración nace de nuestra propia forma de vida pues he hecho reproducciones de rosarios antiguos o collaradas expuestas en el Museo del Bierzo. Este tipo de trabajos está documentado que tiene, al menos, dos mil años, los trajeron los romanos a través de la Ruta de la Plata. Se usaba como moneda de cambio, como adorno o también de amuletos, por eso los seguimos haciendo".

Estos trabajos de cuentas o perlaslos realiza Alma Ruth Magallanes con vidrio de Murano, que pide a Italia.

También trabaja la artesana ponferradina la vidriera artística de gran tamaño. "Es otra técnica diferente pero también muy atractiva para mí; lo que ocurre es que en La cárcel no tengo espacio y estos trabajos ya los hago en una casa que tengo en el pueblo".

Se sienta, coloca las gafas, enciende el soplete... la clase abierta sigue su curso enLa cárcel, al lado de la vieja cárcel, donde brotan las lágrimas de la Encina.
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