Las exportaciones agroalimentarias se duplican en los últimos tres años

El decano-presidente del Colegio de Economistas de Valladolid, Palencia y Zamora (Ecova), Juan Carlos de Margarida, presentó este martes el observatorio sobre la situación actual del sector agroalimentario y aseguró que los fondos europeos deben servir para transformarlo con la vista puesta en el comercio exterior. En todo caso, los datos del informe reflejan que, en el caso de la provincia de León, las exportaciones del sector agroalimentario han experimentado una evolución positiva durante los últimos años.

Concretamente, 2020 dejó un importe de 332,8 millones de euros, lo que supone un incremento de un  15% con respecto a los 289,5 millones que se habían contabilizado en 2019. Ello indica que la pandemia de coronavirus no ha hecho mella en las exportaciones de un sector que se consideró esencial desde el inicio de la crisis . Si se echa la vista más atrás, el observatorio permite concluir que las exportaciones agroalimentarias se han duplicado en los últimos tres años. Concretamente, en 2017, las ventas de las empresas del sector a otros países alcanzaron un valor de 163,2 millones de euros, algo menos de la mitad que en 2020.

El dato que sí se había visto afectado por la pandemia era el del número de empresas del sector agroalimentario que hay en la provincia. Concretamente, la cifra se situaba el pasado mes de febrero en 344, diez menos que justamente un año antes, cuando estábamos a las puertas de la crisis sanitaria. Durante el resto del pasado año, la cifra de empresas del sector agroalimentario llegó a reducirse hasta 334.

De Margarida ha analizado el papel del sector durante la pandemia y el futuro que se abre a sus puertas con los fondos europeos. En este sentido, ha defendido que «el sector agroalimentario tendrá un papel relevante a la hora de beneficiarse de las ayudas y oportunidades a desarrollar por el Plan NextGeneration, instando a la «transformación y digitalización de la cadena logística del sistema agroalimentario y a la conservación y restauración de ecosistemas y de su biodiversidad».

De Margarida advierte de «la necesidad de que los fondos europeos sean gestionados de una forma eficiente y eficaz, teniendo en cuenta la cobertura de internet en el ámbito rural, la sostenibilidad ambiental, la apuesta por la economía circular o el impulso de la digitalización». Además, resalta la importancia, para cumplir estos objetivos, del relevo generacional, la inclusión de la mujer en el medio rural, la formación tecnológica o el desperdicio alimentario. De Margarida ha puesto en valor la importancia y el crecimiento constante del sector agroalimentario mientras «los datos generales confirman la caída histórica del PIB autonómico en los meses más duros de la cuarentena».