Las estrategias electorales

León se vuelve impredecible de cara a las elecciones autonómicas. Se presume que Mañueco puede convocarlas cuando el frío haya pasado y no disuada a las personas mayores de ir a votar. La primavera sería idónea porque reúne dos condiciones: por una parte, no da tiempo a que los jaleos judiciales en Salamanca por supuesta financiación ilegal del PP puedan dañar la imagen del presidente de Castilla y León; por otra, permitiría liquidar políticamente a Ciudadanos e incorporar sus votos en las filas populares. Una victoria así reforzaría a Mañueco en el aparato del PP, pues ayudaría al avance de Casado en las elecciones generales.

Por otro lado, el PP necesita sacar mayoría entre los 13 procuradores que lleva la provincia de León a las Cortes. Es el 16% , tras el 18 % que aporta Valladolid. Un mal resultado en León condena a no obtener mayoría absoluta en las Cortes de Castilla y León. Por ello la expansión de los partidarios de una Autonomía Leonesa empieza a preocupar en la Junta, que está perdiendo el control de la comunicación en ese conflicto. Con el leonesismo social desplegado en multitud de grupos de voluntarios que denuncian el expolio financiero sufrido por la Región Leonesa desde la Junta, el castellanismo popular ve en peligro sus votos en León. Las mociones a favor de la Autonomía Leonesa, promovidas por concejales de todos los partidos, alcanzan ya a 54 municipios, que representan a más de la mitad de los habitantes provinciales leoneses.

La reacción conservadora para frenar el impulso a la Autonomía Leonesa no se ha hecho esperar: la Junta aumentó la asignación económica a los portavoces del Consejo Comarcal del Bierzo, nombró una nueva delegada de la Junta en León con el encargo de hacer proselitismo, renovó la cúpula del PP provincial invocando un trampantojo de leonesismo. Ahora se anuncian reuniones del PP en León: una autonómica y un congreso nacional. Desesperados por ganar visibilidad los populares temen perder el control de León, imprescindible para gobernar la Junta, y a que el eco autonomista leonés crezca en Madrid, lo que inestabilizaría toda la comunidad autónoma.

La mayoría social por la Autonomía de León es clamorosa. En el Bierzo, donde intentaron frenarlo, empieza a permear porque conlleva enormes ventajas para la comarca. El avance leonesista hacia Zamora está próximo y en la Junta se quedan sin contraargumentos. León y Zamora presentan cifras socioeconómicas desastrosas que delatan mala gestión y expolio. No será extraño presenciar un despliegue inusual de los ‘populares’ en León, pero a un daño tan intenso solo tiene una solución: la Autonomía de la Región Leonesa.