La UPL busca su lugar

Este fin de semana se antoja bastante cargadito de información política con distintas convocatorias de ámbito nacional, provincial y autonómico, pero en todas con un importante acento leonés.

En primer lugar, durante la tarde de hoy y la mañana del sábado, tendrá lugar en León un encuentro nacional de presidentes provinciales del Partido Popular. Una cita sin precedente que sin duda significa que León importa y mucho más allá de nuestra región para los partidos nacionales. En ese encuentro, sin lugar a dudas, alguna pregunta a los líderes del PP, irá dirigida hacia la identidad leonesa que unos manifiestan en aspiraciones rupturistas con la Comunidad que nos alberga y otros muestran como un orgullo histórico, pero con la mirada puesta en los problemas reales y los retos de futuro.

Por otro lado, los socialistas celebrarán desde hoy mismo hasta el domingo, su propio congreso autonómico en el que, sin miedo al fracaso y venciendo todo desánimo, Luis Tudanca volverá a dirigir los designios del PSOE de Castilla y León, con la ensoñación de poder llegar a ser presidente de la Junta en algún momento de su vida, bien sea «por lo civil o lo militar».

La delegación socialista leonesa va dispuesta a arrancar algún titular que pueda utilizar para vender en su tierra que ellos son los más reivindicativos con León, nuestras aspiraciones y nuestra identidad. Llama la atención que esas reivindicaciones queden en simple escenificación, cuando el propio alcalde de León, el socialista Diez, ha tenido que acudir al amparo de los parlamentarios populares para hacer llegar unas exigencias a su propio partido en forma de enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado. Cosas de la política…

Por su parte la UPL también celebra mañana su Congreso General, con un tema sobre la mesa más candente que la simple elección de sus representantes. Me refiero al debate sobre la salud del pacto de gobierno en la diputación provincial con el Partido Socialista, fundamentado en un acuerdo de 24 puntos, al que se comprometió el PSOE pero que aún dista mucho de completarse.

La UPL mira a su alrededor y se da cuenta de que, conforme las reivindicaciones del resto de partidos sobre nuestra región se hacen cada vez más explícitas e inequívocas, su hueco electoral cada vez se ve más reducido, por lo que, para poder destacar, algunos de sus dirigentes tienen que radicalizar cada vez más su discurso y lamentablemente, hacia posturas más a la izquierda radical.

En la Diputación de León tienen una baza para ganar ese protagonismo rompiendo el pacto, pero no están seguros de hacerlo. Se encuentran a gusto siendo la muleta del PSOE y aún queriéndolo, tienen dudas de la decisión final de su diputado Matías Llorente, que como de si del Tom Hanks de Cabreros del Río se tratase, ya protagoniza su propia película ‘Salvar al soldado Morán’.