La última carrera de 2016 reúne a unos 1.200 corredores en Ponferrada

Unos 1.200 participantes retaron a la intensa niebla con la que se despertó el lunes Ponferrada para vestirse de largo y recorrer los cinco kilómetros de la San Silvestre, que cumple 38 ediciones con una salud cada año mejor. El de Columbrianos, Álex Martínez, entró en meta de la mano de Antonio Franco y David Parrilla.Querían entrar juntos, tras perderse en alguna calle y para quedarse con el espíritu de unidad de esta prueba que, en la clasificación femenina, fue para la corredora Sheila Simao.

La prueba se inició con cifra récord y con retraso, provocado por las últimas incorporaciones y por las recogidas de dorsales, que obligaron a que la prueba se iniciara medida hora más tarde.
Pero la espera mereció la pena, porque permitió contar con la participación de grandes figuras del cómic y la televisión, siguiendo la tónica de disfrazarse para despedir el año con una sonrisa.

Batman y Robin, incluso Superman  presidieron una comitiva en la que no faltaron las uvas al lado del reloj, esperando la última campanada mientras corrían.
Renos y Papa Noeles no faltaron a la cita, en la que también hubo patinadores, jugadores de rugby, princesas de cuento, Peter Panes...

Los más pequeños se disputaron la primera prueba, de solo 700 metros, en los aledaños del Centro Comercial El Rosal, donde se realizó la carrera que, además, tenía su lado solidario con la recogida d alimentos para las familias más desfavorecidas de la ciudad.

Los cinco euros que costaba la inscripción eran destinados a la Cruz Roja, encargada de gestionar la prueba.
La cita concluyó con un chocolate caliente y la entrega final de trofeos de la mano del concejal de Deportes.