Una quincena de personas pasaron con su ganado por un lugar "donde ahora hay coches pero que siempre fue un paso para el ganado". Cándido Morán García, de 25 años, fue uno de los pastores que este lunes llegaron a la ciudad con su rebaño. En la comitiva también estaba su padre, de 48 años, de quien aprendió este oficio. "Se debe fomentar la ganadería extensiva porque esto no es lo mismo que tener a los animales metidos en una granja. Esto es lo natural, lo de toda la vida. Esto sí es lo ecológico, aunque esté sin certificar", explica este pastor de Matallana de Torío.
"Un día de celebración"
Esta familia lleva más de 15 años moviéndose con sus rebaños por la provincia de León, "antes bajábamos para Extremadura", y este lunes fue "un día de celebración". "También ha venido algún compañero que, aunque ya esté jubilado ha estado toda su vida haciendo esto. Estos viajes son un motivo de celebración y un día para comer todos juntos", apunta este pastor trashumante.
Para los pastores trashumantes, "el sector primario ha estado tocado" pero con la pandemia del coronavirus se ha visto su "verdadera importancia". "Es una forma de sobrevivir y, además, lo que más se adapta a los nuevos tiempos. Esto es utilizar los recursos naturales y en estos tiempos en los que hay tantas enfermedades hay que saber vender la carne de 'kilómetro cero'"», expone Cándido.
Una forma de vida también ligada al futuro del medio rural. Según Cándido, trabajos como el suyo es la forma de mantener abiertos los pueblos. "Mi novia es de la zona de Babia y y suelo ir con el ganado por allí. No tenemos vacaciones pero si las tuviéramos, seguiríamos aquí", concluye este pastor leonés.